Una pareja de ancianos y su hijo mueren al quedar atrapados en un incendio en la Fuensanta

Un matrimonio octogenario, Miguel Rodríguez y Encarna García, y uno de sus dos hijos, Francisco Miguel, que tenía problemas de salud mental, han muerto este lunes en el incendio de su vivienda en un edificio de seis plantas en el número 8 de la calle Escultor Salzillo en la ciudad de Valencia.

Las tres víctimas quedaron atrapadas por el humo y las llamas, que se propagaron con rapidez y destruyeron en pocos minutos dos dormitorios y el comedor de la casa. Los bomberos rescataron al matrimonio y encontraron el cadáver calcinado del hijo en el balcón tras atacar el fuego desde la fachada y el interior de la vivienda.

Los sanitarios practicaron maniobras de reanimación a los dos ancianos, aunque no pudieron recuperar sus constantes vitales, según informaron fuentes de los servicios de emergencia. Una de las víctimas fue asistida en la calle y la otra recibió atención médica en la tercera planta poco después de que los bomberos sacaran a las dos personas de la casa en llamas.

Pero el matrimonio ya había fallecido por intoxicación de humo en los primeros momentos del incendio, según las primeras investigaciones policiales. El siniestro se registró en el barrio de la Fuensanta minutos antes de las siete de la mañana por causas que investiga la Policía Científica, que realizó una minuciosa inspección en la casa siniestrada.

El hijo del matrimonio fallecido salió al balcón para pedir auxilio. «¡Que me quemo! ¡Que me quemo!», gritó varias veces el hombre antes de que llegaran los bomberos. Fueron momentos de gran tensión, nerviosismo e impotencia.

El humo acumulado en el hueco de las escaleras del edificio impedía cualquier intento de ayudar a las víctimas. Uno de los vecinos aconsejó a gritos al hombre que se lanzara desde el balcón para huir de las llamas. Otros le dijeron que era mejor esperar la llegada de los bomberos, que ya habían sido avisados. «Ha sido horroroso. El pobre hombre gritaba y nosotros no podíamos hacer nada», afirmó una mujer que reside en la finca donde ocurrieron los trágicos hechos.

Tras recibir el aviso del incendio, seis patrullas de la Policía Local y Policía Nacional de Valencia y varias dotaciones de bomberos acudieron con urgencia al lugar, concretamente al cruce las calles Luis Fenollet y Escultor Salzillo, pero no pudieron hacer nada para salvar la vida de las tres personas.

Cuatro policías locales de la Cuarta Unidad de Valencia (retén de Campanar), que tardaron muy poco tiempo en llegar al edificio, intentaron subir hasta la cuarta planta, pero no pudieron auxiliar a las víctimas porque el rellano ya estaba lleno de humo.

También se desplazaron cuatro ambulancias, una de ellas del Servicio de Ayuda Médica Urgente (SAMU), cuyos sanitarios certificaron el fallecimiento de las tres personas. Una veintena de bomberos se movilizaron con urgencia desde los parques Oeste, Sur y Campanar.

El fuego destruyó la vivienda donde residían la pareja de ancianos, de 89 y 85 años de edad, y su hijo de 58 años, según informaron fuentes municipales. Una hija del matrimonio fallecido cuidaba a sus padres y su hermano y les compraba comida y medicamentos. La mujer, que resultó ilesa, es sordomuda y reside en otro piso del mismo edificio.

Los policías ayudaron a varias personas mayores a bajar a la calle, ya que les daba miedo quedarse en sus casas ante el avance de las llamas. Los bomberos rescataron a una mujer que se refugió en el cuarto de baño tras seguir las indicaciones de un operador del 112.

El incendio afectó a otra vivienda de la quinta planta y la fachada del edificio. Cuando la primera dotación de los bomberos llegó a la calle Escultor Salzillo, las llamas salían por el balcón de la casa y el hombre ya había dejado de pedir auxilio.

«Me he despertado porque he oído ruidos extraños y he notado un fuerte olor a humo», afirmó una vecina del edificio. «Cuando he salido al rellano y he visto que estaba todo negro he empezado a gritar para avisar a todos», añadió la joven.

Un equipo de la Brigada Provincial de Policía Científica de Valencia se hizo cargo de las investigaciones para esclarecer las causas del incendio. Los especialistas no hallaron indicios criminales en las habitaciones quemadas ni en la puerta de la casa, por lo que todo parece indicar que el fuego se inició de forma accidental. El anciano de 89 años sufría una insuficiencia respiratoria crónica, por lo que requería un aporte continuo de oxígeno medicinal mediante una bombona, que quedó destruida por las llamas

El dispositivo de los servicios de emergencia causó un gran revuelo en el barrio de la Fuensanta. Según los vecinos, el matrimonio fallecido tenía dificultades de movilidad. El Servicio Municipal de Bomberos de Valencia también movilizó una ambulancia con un sanitario.

Los sanitarios asistieron a una mujer de 60 años que resultó intoxicada por inhalación de humo, según informaron fuentes policiales. La víctima y los vecinos desalojados, algunos de ellos en pijama, regresaron a sus domicilios cuando los bomberos terminaron de sofocar el fuego y ventilaron el edificio.

Según informaron fuentes de la Conselleria de Sanidad, a la mujer atendida por intoxicación leve de humo «no fue necesario trasladarla a ningún hospital». Aunque se movilizaron cuatro ambulancias, los medios sanitarios se retiraron cuando les confirmaron que no había más personas heridas. Los bomberos también encontraron un gato muerto dentro del piso quemado. Era la mascota de la familia fallecida.

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