«Están solas, a merced de las mafias y los sicarios»

Una lápida en el cementerio de Albal señala la muerte de Ivana Yutakova. Fue el 10 de julio de 2004, cuando ejercía la prostitución en la población, junto a la Pista de Silla. La joven checa tenía 23 años y la persona que la apartó de la vida con dos tiros jamás ha sido localizada.

Hoy, casi dos décadas después, la historia se repite en este punto negro de la prostitución que son las rotondas de enlace con la carretera V-31. Según denuncia el alcalde de Albal, Ramón Marí, el problema se extiende por su municipio, Alfafar, Sedaví, Massanassa, Beniparrell o Catarroja.

La Guardia Civil seguía ayer tras la pista del asesino de Florina G., la joven rumana de 19 años desaparecida desde el 8 de enero y que el sábado localizaron asesinada en una acequia de Silla.

Para Marí, estas tragedias no son fruto de la casualidad. «Están solas, a la aventura, a merced de mafias y sicarios», valora. «Por más ordenanzas que hagamos contra la prostitución, sólo se puede combatir con el esfuerzo de la policía y la Guardia Civil». Y añade esta reflexión: «Todos sabemos que son explotadas por mafias, que ellas dependen de estos grupos, pero si cuando se les pregunta dicen que están ahí por voluntad propia es difícil actuar«.

En el caso de Ivana, el Ayuntamiento de Albal pagó el nicho a la víctima. «Y ahora, si fuese necesario, también lo haríamos» con Florina, remarca Marín. Ella tendrá, de momento, su acto de recuerdo. Una condena popular para su doloroso final. La intención del consistorio es celebrar una concentración mañana a las 12 horas con un minuto de silencio en su memoria.

Mientras, la compañera de piso de la chica, también rumana, asegura que va a iniciar los trámites para retornar a Rumanía a la víctima una vez lo autorice el juzgado que instruye el caso. Según recuerda, «Florina llegó a España hace un año, es hija de padres separados y tiene una hermana menor en su país». Era «alegre y amaba la música o bailar». De hecho, «solía llevar un móvil sin tarjeta para escuchar canciones». En su periplo por la Comunitat, Florina había vivido en la Pobla Llarga y Alzira.

La tristeza y condena llega también desde la asociación Casa de la Dona de Silla. Su presidenta, Elvira Catalán, insta a las fuerzas de seguridad a «acabar con las redes de explotación sexual en los viales de incorporación y caminos adyacentes a la Pista de Silla» y evitar así «nuevos asesinatos» como el de la joven Florina.

El colectivo propone que todos los municipios vecinos de Albal, Beniparrell y Catarroja «se sumen a la red de localidades libres de trata de mujeres y niñas». Demanda «todas la medidas a su alcance para acabar con la explotación sexual de mujeres».

La Casa de la Dona tambien invita a los grupos políticos de la corporación municipal de Silla a sumarse a la campaña de sensibilización bajo el lema «ir de putas es violencia machista».