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J. A. Marrahí / AGENCIAS
Lunes, 8 de junio 2020
La larga huida del temido 'Rambo de Requena' finalizó ayer con sangre derramada en Teruel. La Guardia Civil logró detener por la tarde a Pedro Lozano Jiménez, el vecino de Sagunto de 28 años que en los últimos meses ha puesto en jaque a la Guardia Civil tras cometer una oleada de robos en el interior de Valencia. El 'Rambo' robó dos coches e hirió de bala a un agente de la Benemérita. Minutos después, escapó por los montes de la pequeña localidad de Andorra pese a que ya había recibido un disparo en la pierna de uno de los agentes que participaron en el dispositivo. Allí fue capturado. Tanto el malhechor como el guardia permanecían ingresados al cierre de esta edición en un hospital de Zaragoza.
La tensión en Teruel se desató sobre las doce del mediodía. La Guardia Civil recibió el aviso del robo de un coche, de marca Suzuki, en la localidad turolense de El Castellar. Todo cuadraba con el modus operandi de Pedro Lozano, quien arrastra un rosario de robo de vehículos intimidando a las víctimas y estaba considerado muy peligroso al ir armado con una escopeta de cañones recortados.
Tras esa primera sustracción se activó un potente dispositivo policial. Ya sobre las tres y media de la tarde, una patrulla del cuartel de la Guardia Civil de Muniesa localizó el vehículo en un control de carretera. Pero cuando uno de los agentes se dirigió al conductor para identificarlo, Pedro abrió fuego presuntamente contra el guardia con su escopeta. Juan Carlos es, según Efe, el nombre del guardia herido y el disparo le alcanzó en el abdomen. Al parecer, su compañero de patrulla respondió a los disparos del delincuente e incluso logró alcanzarle en una pierna, pero no consiguió impedir su huida a la carrera. Al mismo tiempo, solicitó una ambulancia urgente para Juan Carlos. Éste último, de la localidad zaragozana de Loscos, fue evacuado en helicóptero al hospital Miguel Servet de Zaragoza. Según los primeros informes médicos, permanece estable.
De Muniesa a Andorra
Al cabo de 20 minutos, su rastro reapareció en el pueblo vecino de Andorra, a unos 35 kilómetros de Muniesa. Allí se apoderó de un Citroën que fue localizado por la Guardia Civil en torno a las cuatro y media de la tarde. En esta ocasión, Pedro no estaba en el interior. Sin embargo, el amplio dispositivo desplegado por la Guardia Civil culminó con su localización en los montes de este último municipio. Estaba herido de bala y fue trasladado en helicóptero a Zaragoza.
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Durante la persecución, antes del arresto, el miedo se apoderó de las dos localidades turolenses. El alcalde de Muniesa, José Luis Iranzo, autorizó un bando que alertaba a los vecinos para que no salieran de sus casas y extremaran las precauciones. También el primer edil de la vecina Andorra, Antonio Amador, hizo lo propio con sus lugareños. Ante la posible presencia de 'Rambo' en las calles era pertinente la «máxima precaución» y permanecer a refugio en los hogares.
Esta zona de Teruel revivió ayer el miedo vivido hace tres años, cuando otro delincuente, Igor 'El Ruso', acabó con la vida de dos guardias civiles y un ganadero en diciembre de 2017.
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