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Protesta contra el cierre de un repetidor de TV3. :: EFE/MORELL
Politica

Climent se plantea la venta de los repetidores de TV3 al no poder pagar la multa

La Generalitat de Mas busca un acuerdo institucional con el Consell al margen de Acció Cultural del País Valencià

S. P.

Lunes, 18 de abril 2011, 10:03

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Acció Cultural del País Valencià (ACPV) estudia seriamente la posibilidad de poner en venta, según las fuentes consultadas por este periódico, los repetidores que tiene instalados por la Comunitat Valenciana para que se pudiera ver TV3. La sanción impuesta por el Consell y el hecho de que el futuro acuerdo de reciprocidad entre Cataluña y la Comunitat sea a través de un múltiplex de TDT hace que los repetidores ya no sean imprescindibles.

Durante la manifestación a favor de TV3 que recorrió desde las torres de Quart a las de Serranos se repartieron bonos de ayuda a Acció Cultural para pagar la multa impuesta por la Generalitat. Las mismas fuentes señalaron que la venta de los repetidores se podría cifrar en algo más de dos millones de euros.

La crisis económica hace improbable que la Generalitat de Catalunya esté dispuesta a abonar la multa de Acció Cultural o a sufragar una parte de la misma. Más en tiempos donde el dinero se destina básicamente al pago de las cuestiones básicas (sanidad, educación, dependencia...) para los ciudadanos.

La negociación para que TV3 se vea en la Comunitat pasa ahora por un acuerdo de reciprocidad institucional entre los gobiernos valenciano y catalán al margen de colectivos culturales y sociales. En la reunión que el presidente de Cataluña, Artur Mas, y el de la Comunitat, Francisco Camps, que estaba prevista para el 20 de abril (no se hará por la convalecencia del presidente valenciano) la cuestión de TV3 se iba a poner encima de la mesa.

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Mas está por la labor de cambiar las normas. De no funcionar a golpe de subvención para aquellos que promueven la cultura catalana en la Comunitat sino de crear un ambiente de reciprocidad institucional y política entre dos comunidades que, entre otras cosas, tienen en común proyectos de la envergadura del Corredor Mediterráneo.

Los movimientos de Acció Cultural para poner en venta los repetidores cerrados por la Generalitat (es prácticamente imposible que se pueda volver a emitir TV3 a través de ellos) ponen de manifiesto las dificultades de la organización de Climent para pagar la multa.

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