El Casino de Agricultura abrirá la terraza como zona de ocio

Nacida para defender el campo valenciano y convertida en referente cívico y social durante muchos años, la Real Sociedad Valenciana de Agricultura y Deportes ha renovado a su junta directiva y el cargo de presidente, que desde esta semana recae en el corredor de seguros ya jubilado Manuel Sánchez Luengo.

Cordobés y valenciano, como él mismo se define, Sánchez Luengo llega a la presidencia del conocido popularmente como Casino de Agricultura con un pensamiento fijo: potenciar los usos de los diferentes espacios y salas de la sede con un doble objetivo. Por un lado, mantener los socios actuales; por otro, atraer a la nueva generación de jóvenes valencianos.

Para ello, uno de los aspectos que baraja la entidad es abrir la terraza del edificio como zona de ocio e, incluso, habilitar una planta de la sede sólo para los jóvenes durante el fin de semana. Según Sánchez Luengo, «la cubierta del edificio está en perfecto estado porque en su tiempo, cuando gestionábamos la Hípica, se destinó a zona lúdica y acogió verbenas».

Otra de las propuestas que tiene sobre la mesa la nueva junta directiva es la apertura de un gimnasio mixto, aunque, como apunta el presidente, «es un tema que tiene pros y contras. Pero estoy seguro de que mucha gente mayor lo utilizaría. Yo el primero».

Con estas dos propuestas, el nuevo presidente del Casino confía en mantener a los socios antiguos y dar «algo atractivo para los jóvenes menores de 30 años, que no nos conocen». También se evitaría, a su juicio, la fuga de socios.

Y es que la crisis también ha llegado a esta entidad de 153 años, que cuenta actualmente con cerca de 1.500 socios. «La gente que es socia y casi no viene se plantea para qué servimos. Por eso tenemos que buscar nuevos usos y actividades», afirma Sánchez Luengo.

Salones para eventos

Una extensa biblioteca, servicio de prensa diaria, torneos de diversos juegos de mesa (en el de la canasta participan 200 mujeres), charlas culturales son algunos de los servicios que presta el Casino de Agricultura. Para acceder tan sólo hay que contar con el aval de tres socios numerarios.

También cuenta con un servicio de restaurante, que ahora se quiere potenciar. Al igual que la promoción de sus espacios para la celebración de eventos institucionales, de empresa o de particulares. «Estamos preparados para acoger una reunión de trabajo o una comunión. Y no es necesario ser socio para poder hacerlo», puntualiza el responsable de la entidad centenaria que fue galardonada con la Medalla de Oro de la Ciudad.

Preguntado por el papel de la sociedad civil en el contexto actual de crisis, el presidente de la Sociedad de Agricultura cree que es un momento difícil «para todos» y que la sociedad «debe entender y asumir que los recortes son necesarios».

Ahora Sánchez Luengo confía en tener tiempo para poder aplicar estas medidas, ya que el mandato es para dos años. No obstante, quiere plantear ante la asamblea la ampliación a cuatro años.