"Nos han dicho que están estudiando un solar alternativo que no creen que sea adecuado para lo que necesitan». Con este mensaje tan agridulce ha salido este viernes Mari Carmen Barea, presidenta de la Asociación de Vecinos de Benimàmet, de la reunión con el gabinete de la consellera Aitana Mas, que recibió a los vecinos que habían anunciado una protesta en la plaza de Nules, donde tiene la sede la conselleria.
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Benimàmet mantiene las concentraciones porque, en palabras de Barea, necesitan imperiosamente dotaciones públicas. Y el solar donde va a ir el centro de menores está reservado «desde hace una década» para un centro cultural y un centro de día. «Nos han dicho que están buscando también alternativas fuera del barrio», comenta Barea, que resume la reunión de este viernes con el muy valenciano ‘de forment, ni un gra’.
Casi cuatro decenas de vecinos de Benimàmet se habían concentrado este ante la Conselleria de Políticas Inclusivas para protestar por el centro de menores que el departamento que dirige Aitana Mas quiere abrir en la pedanía. «¡Aitana, escucha, Benimàmet está en lucha!» ha sido la frase más coreada por los asistentes, que se niegan a ser tildados de racistas.
La presidenta de la entidad, Mari Carmen Barea, ha sido convocada a una reunión con el gabinete de la consellera, que estaba en la rueda de prensa del Consell. La conclusión de ese encuentro se puede resumir en una frase: 'De forment, ni un gra'. El nuevo solar ofrecido por el Ayuntamiento no encaja a la conselleria. El PSPV ya se ha mostrado a favor de los vecinos.
La clave que conviene entender, insisten los vecinos, es que no es una cuestión de racismo. Benimàmet no tiene centro de día para personas mayores ni centro cultural, espacios más reclamados por los vecinos que un centro de menores.
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Mas se había comprometido este jueves a estudiar las alternativas planteadas al centro de menores y a «intentar encontrar consenso» con los vecinos. Sin embargo, las alternativas propuestas por el Ayuntamiento, en cuya concejalía de Urbanismo los vecinos tienen una poderosa aliada, no han convencido a la conselleria, que sigue adelante con el plan.
Las concentraciones vecinales, por tanto, seguirán. La pedanía ha celebrado varias desde que se conoció el proyecto, tanto en el solar donde iría el centro como en la plaza Luis Cano. También hicieron una manifestación por las calles del barrio. A las concentraciones en Benimàmet acuden unas 350 personas, según datos de la asociación de vecinos, que asegura que el rechazo al proyecto en el barrio es total y no porque no quieran un centro de menores sino porque, insisten, creen que hay «otras dotaciones» mucho más necesarias.
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