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«Olvídense del proyecto hasta nuevo aviso». El correo que Mestres Campaners recibió por parte del párroco de Santa Catalina, José Benito, en noviembre de 2023 era lapidario. En él, el rector del templo apartaba a la entidad de la rehabilitación de las campanas ... de la iglesia, que empezó en agosto del pasado año. Ahora, esta relación tan tensa ha terminado por romperse del todo cuando el párroco ha impedido a la entidad que preside Vicente Mesa acudir a una reunión programada con la directora general de Patrimonio, Pilar Tébar. El motivo: que los campaneros iban a pedir dinero para las campanas, obviamente, y no para las cubiertas de la iglesia que, según la asociación, el párroco cree que necesitan una rehabilitación más urgente. La relación de Mestres Campaners con el padre Benito nunca ha sido la mejor. «No sabemos por qué», admite Mesa. De hecho, según varios correos electrónicos a los que ha tenido acceso este diario, el párroco les llegó a decir, de forma textual, que otro cura no habría tenido tanta paciencia con ellos: «De ser otros sacerdotes con distinto temperamento 'ya les hubieran puesto de patitas en la calle'. Sí o sí».
Mestres Campaners se ha encargado de buscar dinero para restaurar las campanas del templo, que datan de distintas fechas, aunque el conjunto original es del siglo XVIII. Dos de ellas se bajaron el día de San Lorenzo, el 10 de agosto, de 2023, aprovechando que es el día de más calor del año y los campaneros se sirven de la dilatación del metal para que sea más fácil retirar o apretar las tuercas de las campanas.
Ahora, llegaba el momento de buscar los 200.000 euros que hace falta para rehabilitar las otras cuatro. En esa estaba Mestres Campaners cuando el sacerdote les prohibió tajantemente que mantuvieran conversaciones con ninguna entidad o administración tendente a hacer estos trabajos. Parece que lo que al cura le molestó es que en las reuniones que había celebrado la asociación con la Generalitat o el Ayuntamiento no se hablaba de otra cosa que no fueran las campanas, cuando el templo tiene goteras y necesita trabajos en la cubierta.
«Es justo que valoremos las actuaciones hechas hasta la fecha, que lo haremos, y tratemos la viabilidad de continuidad de la asociación campaneros con Santa Catalina, que la definiremos o no. Este será nuestro último paso. Ciertamente, tenemos otros asuntos más urgentes que desarrollar de cara al mantenimiento del templo y, por encima de todo, el cuidado del culto y la feligresía», indica el sacerdote en un correo. Fuentes del Arzobispado de Valencia indicaron este sábado que no dan por rota la relación con la entidad, pero sí que hay otras prioridades en el templo.
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