El cine Metropol de Valencia sale de nuevo a escena

Están a punto de cumplirse los t res años desde que una empresa presentara en el Ayuntamiento la propuesta de derribo del antiguo cine Metropol (Hernán Cortés, 9) para construir en su lugar un hotel. De manera inmediata se generó un movimiento de defensores del patrimonio histórico para impedir la desaparición del inmueble diseñado por el arquitecto Javier Goerlich e inaugurado en 1932, lo que hizo hibernar el proyecto pese a que no había informes en favor de su protección. Eso puede cambiar a partir de ahora.

El alcalde Joan Ribó anunció por la mañana y ratificó después la concejala de Recursos Culturales, Glòria Tello, que el Ayuntamiento pedirá sendos informes al Consell Valencià de Cultura y a la Real Academia de San Carlos sobre la protección de la finca, para señalar el primero que está a favor de mantener la fachada, de estilo art decó.

La medida se queda corta para la plataforma Salvem el Metropol. Uno de sus portavoces señaló que el antiguo cine «está justo detrás, la fachada tenía viviendas y en la planta baja, las taquillas y el acceso a la sala». Para entender esto es necesario conocer que las fincas originales fueron construidas en 1882 y que durante la II República, Goerlich se encargó de modificar la fachada del número 9 y construir la sala de cine en un gran patio de manzana que llega hasta la parte trasera de la vieja sede de Iberdrola en la calle Isabel la Católica. Tenía un aforo de 1.200 plazas.

La plataforma cultural quiere, con el apoyo de documentos como la resolución del Síndic de Greuges de 2017, que se proteja por completo todo el inmueble para declararlo Bien de Relevancia Local. Esto choca frontalmente con el anuncio de Ribó.

Tello dijo que los dos informes pedidos tratan de «abastecer a la ciudad del máximo nivel de informes que garanticen la protección patrimonial de este edificio, si así lo estiman en la Academia de San Carlos y en el Consell Valencià de Cultura». La edil dijo que el «mantenimiento del Metropol es uno de los temas prioritarios que venimos trabajando desde lejos en la concejalía».

La vicealcaldesa Sandra Gómez terció también en el debate, anunciando que se ha pedido a la Conselleria de Transparencia que haga un informe en base a la Ley de la Memoria Histórica, con el fin de tener más argumentos de cara a la protección de la sala. Fuentes de la Generalitat no confirmaron si este documento está ya concluido, que en teoría se basará en el papel jugado por el Metropol en la II República.

Al igual que otros recintos de este tamaño en Valencia, acogió encuentros de intelectuales en congresos. Perteneció al llamado Comité Ejecutivo de Espectáculos Públicos durante la Guerra Civil, según desveló hace dos años la asociación Círculo por la Defensa del Patrimonio, en un trabajo de investigación de César Guardeño y Fernando Sanz. Su demolición, según esta entidad, incumpliría la Ley de la Memoria Histórica. Por el contrario, un informe encargado el pasado mandato por la concejalía de Urbanismo descartó desde el punto de vista arquitectónico y patrimonial la protección de la finca.

Ahora, Gómez parece más proclive a buscar otras fórmulas para salvar el edificio, aunque otra cuestión es determinar el futuro de esta propiedad, que sigue siendo privada. Dijo que «ya se solicitó en la anterior legislatura», según recogió Europa Press, para insistir en que se trabaja para ver si desde la administración autonómica «se puede ya certificar la protección del edificio».

Según explicó Tello, tanto la Real Academia de Bellas Artes como el Consell Valencià de Cultura son entidades consultivas oficiales y, por tanto, sus informes tienen un valor reconocido por la ley. La concejala de Licencias de Actividades, Lucía Beamud, tendrá una reunión con los promotores del proyecto la próxima semana para «para encontrar la mejor solución».