

Secciones
Servicios
Destacamos
Lola Soriano
Valencia
Martes, 18 de julio 2023, 00:50
Los hosteleros del paseo marítimo de la Malvarrosa están pendientes de conocer si el primer pleno del Ayuntamiento de Valencia, tras las elecciones municipales y ... la investidura de María José Catalá como alcaldesa, recoge en el orden de día la aprobación definitiva del plan especial del paseo, ya que es el paso que queda para poder obtener la licencia de obras e iniciar la transformación de los restaurantes de primera línea de playa.
Por eso, la asociación que agrupa a los empresarios del sector hostelero del paseo de la Malvarrosa, urge a que el Ayuntamiento de Valencia lleve este tema al pleno de la próxima semana para poder avanzar y fijar en el calendario los plazos de derribos y construcción de los nuevos chiringuitos.
En principio, los derribos de los doce locales del paseo de la Malvarrosa estaban proyectados desde antes de la pandemia y, luego, se fueron pidiendo prórrogas de las licencias de derribo que concede el Consistorio, a la espera de que se hiciera el necesario cambio del plan urbanístico.
Noticia Relacionada
La modificación tuvo la aprobación provisional en marzo de 2022, durante el mandato del gobierno de Ribó, pero luego ya tras las alegaciones, quedó pendiente la aprobación definitiva.
El visto bueno a esta modificación es vital para poder contemplar que las cubiertas de los nuevos locales no tengan que tener forma de tresbolillos, tal como se recogía, sino que sea una cubierta en forma de dientes de sierra, para poder incluir placas solares con el fin de bajar las facturas de consumo.
Cabe destacar que los locales actuales datan de la década de los 90, pero el Ministerio de Transición Ecológica exigió en su momento la reforma de los mismos para mantener las concesiones.
Y es que si los actuales restaurantes tienen gran parte del edificio de obra, de hormigón, y los que se proyectan tendrán una parte muy importante acristalada, para permitir unas mejores vistas desde el paseo de la playa.
De hecho, los nuevos locales, como detalla el presidente de los hosteleros de la Malvarrosa, José Miralles, se están construyendo desde hace meses en una empresa, Casas Inhaus, con sede en Almussafes, porque serán módulos prefabricados que prácticamente se diseñan y construyen en la nave y se montan in situ e implantan en un sólo día.
Tal como añade Miralles, «la idea que llevamos es poder empezar este octubre, tras la temporada de verano, e ir actuando de dos en dos en los locales, para garantizar el servicio y la atención a los clientes en la playa».
En cada bloque de dos locales precisarían unos dos meses, tiempo calculado desde que se hacen los derribos, se modernizan las canalizaciones y servicios, y se instalan los nuevos edificios modulares.
Pero la cuestión, es que necesitan la aprobación definitiva del plan especial «para tener la seguridad jurídica y la posterior licencia de obras» y así poder empezar en octubre y terminar todo el proceso en abril, para la campaña de Semana Santa y Pascua.
Si no se lleva con prontitud a aprobación, los hosteleros añaden que ya tendrían «que posponer las obras hasta después del verano de 2024, hacia septiembre de 2024, porque no pueden hacerse los trabajos en la temporada alta». Miralles añade que esto «supondría perder un año».
En cuanto a la capacidad y uso de los nuevos locales, cabe recordar que actualmente los hosteleros cuentan con una terraza en el paseo de unos 100 metros cuadrados, más el comedor de planta baja, y en ambos puntos pueden albergar unos 150 comensales.
Con los nuevos restaurantes, además de ganar luminosidad, tendrán más espacio en el propio edificio. El lugar destinado a terraza en el paseo se reduce a un máximo de 70 metros cuadrados, pero a cambio, se pone en servicio la planta superior, que hasta ahora sólo podía usarse como almacén.
En la planta superior contarán con un salón cubierto de unos 180 metros cuadrados y una terraza superior descubierta de 50 metros cuadrados y, por lo tanto, entre la planta inferior y la superior, sumarán 250 comensales.
La inversión que hará cada hostelero en el nuevo edificio rondará los 800.000 euros. Cada restaurante estará construido a partir de ocho módulos (cinco se usarán para la planta baja y tres para la superior), como indican desde Inhaus y, además, están personalizando el diseño de la cocina de cada local, según las necesidades del cliente.
Durante un mes y medio se completa el derribo del viejo local, se hacen las acometidas y se prepara la cimentación y los módulos se transportan y montan en un día. Para luego hacer terminaciones o reconexiones.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.