El desguace de la Capital del Diseño

Iba a ser lo más. Y cerca de seis meses después, como ha podido confirmar LASPROVINCIAS, el Ágora del Diseño sólo es un montón de piezas apiladas en un almacén, en un espacio que se asemeja a una sala de despiece. Allí esperan un destino digno, el que merece aunque sólo sea porque a los valencianos les costó 470.000euros de instalar y otros 70.000 para su retirada.

El Ágora del Diseño nació para convertirse en emblema de la ciudad, de la Valencia que en 2022 fue Capital Mundial del Diseño con la aspiración de ser referente, de que en cualquier parte del mundo dirigieran la mirada hacia ella. La gran cita necesitaba bandera que ondeará para dar a conocer que la del Turia también era e iba a ser la capital del diseño. Y por enseña se escogió aquel edificio efímero levantado en la plaza del Ayuntamiento.

Tras cumplir su cometido, espacio central de las actividades del gran evento arropado por el Consistorio que presidió Joan Ribó, llegó la hora de su retirada. No sin polémica, pues se había instalado en el lugar reservado a plantar la falla municipal, en febrero abandonó el epicentro urbano con la promesa de que se instalaría en La Marina. Iba a ser espacio dedicado a actividades culturales.

Ahora se ha descubierto que el gobierno que tras las elecciones del pasado 28 de mayo salió de los despachos municipales, dejó sin resolver el asunto. Todavía no se ha reinstalado el Ágora. Hoy, como ha podido comprobar LASPROVINCIAS, sólo es carne de almacén. El pasado junio, como publicó este periódico, desde el entorno de la gestión de la Capitalidad Mundial del Diseño se apuntó que el asunto dependía del acuerdo que adoptaron la entidad gestora de La Marina y el propio Ayuntamiento. Además, afirmaron que la reinstalación del edificio efímero se encontraba a expensas del concurso correspondiente, asunto que el exalcalde Ribó no llegó a resolver.

Ante la situación observada en torno a la gran apuesta creativa del gobierno que presidió Ribo, la actual Corporación ha denunciado que «el anterior gobierno municipal, Compromís y PSOE dejó el Ágora del Diseño sin un plan tras su desmontaje». Los nuevos gestores del Consistorio han incidido en que la estructura, que tuvo un funcionamiento efímero en la plaza del Ayuntamiento «durante un año, se desmontó el pasado febrero. Y ahora lleva seis meses almacenada en la Base 3 de La Marina». Declaraciones que no hacen más que describir el paisaje de materiales almacenados que en estos momentos ofrecen las láminas de madera, bastidores y otras piezas que dieron forma al Ágora.

¿Qué más se sabe? ¿Qué previsión se hizo para ofrecer el destino anunciado al Ágora? La concejal Paula Llobet asegura que «a día de hoy no existe ninguna hoja de ruta de la antigua corporación para trasladar esta estructura». Y no sólo eso, según las palabras de Llobet, tampoco hay «un presupuesto previsto para este montaje, ni se contempla un proyecto de contenido para el Ágora , como tampoco un programa de contratación».

La retirada de la instalación la llevaron a cabo empleados de la contrata municipal. La intervención necesitó la aprobación de una modificación de crédito por importe de 70.000 euros. Esta gestión desveló que cuando se instaló el edificio efímero no se tuvo en cuenta que habría que retirarlo y que por tanto en el contrato para el montaje debió preverse el presupuesto para el desmantelamiento.

No fue éste el único despropósito que se observó a lo largo de la 'efímera' vida del emblema de Valencia Capital Mundial del Diseño. Dada su localización, debía abandonar la céntrica plaza antes del 1 de marzo, fecha de la primera mascletà de las Fallas. Desapareció de este espacio dos días antes de la primera cita con el fuego fallero tras un considerable retraso y entre las críticas de los grupos municipales entonces en la oposición.

La actuación tomó el camino de en medio. El tiempo acuciaba y el Consistorio decidió que la base de hormigón sobre la que se había levantado no se quitaría antes de las fiestas falleras. El monumento municipal se plantó sobre esa superficie sobrepuesta al suelo que no desapareció hasta finales de marzo.

No es éste el único asunto relacionado con la Capital Mundial del Diseño que aguarda respuesta. La Associació València Capital del Disseny, gestora del acontecimiento, no ha presentado los resultados definitivos que expliquen la repercusión del evento en la ciudad. Y por lo que dijo la organización, habrá que esperar a final de 2023. ¿Qué quedará de la Capital Mundial del Diseño?

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