

Secciones
Servicios
Destacamos
«Tengo que empezar con una noticia que no es agradable pero que no nos queda más remedio que ejecutar. Es un verdadero drama, porque ... hablamos de Servicios Sociales, de atención a personas que no llegan a final de mes o dependientes. Pero el anterior gobierno no invirtió y ahora tenemos que devolver el dinero». La rueda de prensa del portavoz del Ayuntamiento de Valencia, Juan Carlos Caballero, arrancó con estas 'malas vibras': las que el representante del gobierno de Catalá, y número dos 'de facto' de la alcaldesa, lanzó al anunciar «una noticia», como él la calificó: la devolución del Ayuntamiento de Valencia de casi tres millones de euros de ayudas concedidas por la Generalitat al Consistorio al pasar el plazo para invertirlas.
En concreto son 2,8 millones los que la Junta de Gobierno Local aprobó este viernes devolver al Consell, al no ejecutarse dentro del plazo la subvención autonómica destinada a ayudar a personas vulnerables. Caballero desgranó el montante del dinero a devolver. La mayoría de los fondos que ahoran regresarán a las arcas de la Generalitat, 2,5 millones, es una financiación que debía haberse destinado al Equipo de Atención Primaria Básica.
Esa partida iba destinada a contratar a más de 400 profesionales para atender a personas sin recursos. «El anterior gobierno de Ribó sólo justificó la contratación de algo más de 300 personas», según detalló el portavoz municipal. Algo más de un centenar se quedaron sin sumarse a los Servicios Sociales del Consistorio por ineficacia del anterior ejecutivo. Así que los millones tendrán que ser devueltos al Consell, al no cumplirse las condiciones del pliego de ayudas.
El resto de la ayuda que ahora Valencia tendrá que devolver son 300.000 euros que deberían haberse destinado a la ayuda a domicilio para personas dependientes, algo que nunca se hizo por parte del anterior Ayuntamiento comandado por Ribó.
Hace justo un año ya pasó algo similar. Con una cifra económica más elevada. «Compromís y PSPV son un gobierno agotado sin ganas de trabajar como demuestra el tener que devolver a la Generalitat más de 3,6 millones de euros a la Generalitat por subvenciones no ejecutadas, una vergüenza». Así lo denunció entonces la jefa de la oposición y hoy alcaldesa de Valencia, María José Catalá. La historia se repite este año.
En 2002 fue Catalá quien repasó las subvenciones que la Generalitat ha requerido al Ayuntamiento. Destacó los 1,2 millones que devolvió el Consistorio por no ejecutar un programa destinado a la contratación de personas jóvenes por entidades locales. Otra cifra notable fueron los 1,1 millones por retrasarse en la puesta en marcha de los programas de itinerarios de inserción social en situación o riesgo de exclusión social, un concepto del que volvió a olvidarse un año después el gobierno de Ribó.
También este viernes el Ayuntamiento de Valencia anunció la concesión de ayudas a entidades sociales. La Junta de Gobierno Local ha aprobado la adenda al convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de València y la entidad Esclavas de Mª Inmaculada para ayudar en el alojamiento, manutención y apoyo socio-educativo de 30 personas susceptibles de incorporarse al mundo laboral, todas ellas objeto de atención de los programes de acogida. A través de esta adenda, el consistorio aprueba la primera prórroga de las dos contempladas en el convenio y concede así una subvención anual de 201.000 euros a la residencia religiosa Esclavas de Mª Inmaculada, centro benéfico social.
Asimismo, se ha aprobado la segunda prórroga del convenio con la fundación privada Amigos de los Mayores por un importe de 10.000 euros. Por otro lado, el Ayuntamiento ha firmado un convenio de colaboración con la Asociación Domus Pacis-Casal de la Pau, por el que se conceden 15.000 euros para desarrollar el «Proyecto Global de Carmelitas. Acogida a personas enfermas sin apoyo familiar».
El Casal de la Pau atiende a personas en situación de exclusión social y actualmente dispone plazas para acoger a personas en libertad condicional por enfermedad que carecen de un entorno familiar adecuado para cubrir sus necesidades y ofrece cuidados sanitarios específicos y de apoyo social.
«Este tipo de iniciativa supone una mejora de la calidad de la atención a las personas en situaciones de especial vulnerabilidad, por lo que se considera conveniente suscribir este convenio, cuya vigencia será de un año prorrogable por anualidades sucesivas hasta un máximo de tres», como han destacado desde el Consistorio.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los ríos Adaja y Cega, en nivel rojo a su paso por Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.