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El concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de Valencia, Carlos Galiana, se ha escudado, como hizo anoche Mónica Oltra, en un decreto de hace un mes para justificar la autorización de la cabalgata. Asegura que se permitió su celebración siguiendo «todas las indicaciones y normas de las autoridades sanitarias, publicadas tanto en el BOE como en el DOGV, al igual que se ha hecho en todas las actividades que se han organizado por parte del Ayuntamiento alrededor de las fiestas de Navidad«. El decreto de la conselleria de Sanidad en el que se permiten las cabalgatas es del 5 de diciembre, cuando la Comunitat estaba en una situación epidemiológica muy diferente.
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Galiana ha explicado, en un comunicado, que la 'recepción' «consistió en un acto en el interior del Ayuntamiento, que contaba con una planificación previa y completa en cumplimiento de las medidas establecidas por las autoridades sanitarias. De hecho no se registraron incidencias policiales«.
El edil ha indicado que las aglomeraciones se dieron» en un momento puntual, en la entrada de los Reyes en la Casa Consistorial, cuando al exterior (al aire libre), las personas que estaban en la plaza, sin convocatoria previa, se acercaron a las vallas colocadas para garantizar la seguridad«. »Fue una entrada rápida la de los Reyes Magos al Ayuntamiento, aún así lamentamos la situación que se produjo. Habrá que mejorar los protocolos para asegurar que no haya ningún resquicio, ni siquiera puntual, en que se puedan ver comprometidas las medidas sanitarias, aunque sea al aire libre«, ha indicado el concejal, que apunta así hacia Sanidad.
«El Ayuntamiento de Valencia reitera su máximo compromiso con el cumplimiento estricto de las normas establecidas por las autoridades sanitarias competentes, al igual que se ha hecho en este caso, y el trabajo para mejorar y velar por los intereses de la ciudad«, ha señalado Galiana.
Por su parte, la portavoz municipal del PSPV, Sandra Gómez, ha insistido en que ellos pidieron que se anulara el traslado de los Reyes «para evitar cualquier tipo de aglomeración». «Tenemos que reflexionar y anular cualquier tipo de acto público. Desde la Administración pública tenemos que tener un plus de ejemplaridad, coherencia y responsabilidad«, ha dicho Gómez.
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La también vicealcaldesa ha asegurado que el «doble juego» de «pedir una cosa por la mañana y hacer otra por la tarde» «siempre sale mal». «Tenemos que aprender a remar conjuntamente, a asumir los errores de forma colectiva cuando se cometen y a asumir las responsabilidades que tenemos en uno de los momentos más importantes de nuestra historia», ha señalado en unas declaraciones remitidas a los medios de comunicación
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