Los ingenieros denuncian el retraso de más de un año en las licencias de actividad en Valencia

El Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de Valencia ha denunciado que el «embudo administrativo» en el que se ha convertido la concejalía de Espacio Público del Ayuntamiento de Valencia provoca ya «que centenares de empresas que se quieren implantar e iniciar la actividad en Valencia paralicen sus inversiones o las demoren».

El motivo de este retraso es el Certificado de Compatibilidad Urbanística (CCU), un documento que se solicita al Consistorio para iniciar cualquier tipo de actividad en la Comunitat Valenciana según la ley 6/2014 de prevención, calidad y control ambiental de actividades. El colegio explica que cuando solicitas el CCU «pasados 30 días puedes presentar el proyecto de actividad y obras junto con la declaración responsable (según el instrumento ambiental de aplicación)». Aseguran que el problema «es que el Consistorio puede contestar pasado el plazo del silencio administrativo e incluso una vez terminadas las obras y hacernos un requerimiento, respecto a dicha compatibilidad urbanística, que ya no se pueda subsanar o que haga inviable el proyecto».

«Es por ello por lo que los inversores deben esperar a obtener el CCU, pero cuando el plazo de su obtención se dilata en el tiempo, como está pasando actualmente, estos deciden no llevar a cabo la inversión por la inseguridad jurídica que conlleva», asegura el colegio en un comunicado.

«Según hemos podido constatar mediante conversaciones con distintos colegiados el Ayuntamiento tardaba en otorgar el CCU entre 15 días y un mes y medio. Ahora, en cambio, para hacer grandes proyectos como un coworking, hoteles, fábricas o discotecas, por poner un ejemplo, están tardando un año o más», lamentan los ingenieros. «Además, pasado este tiempo, cuando la administración contesta, se iniciará el trámite de la licencia urbanística que caso de no ser por declaración responsable, supone una demora adicional al inversor de un año para que se le conceda», explican.

Por esto, el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de Valencia denuncia que estos retrasos son «inadmisibles ya que están provocando que muchos inversores y promotores se estén llevando sus proyectos a otras ciudades», como ahora a Málaga o Granada. «Hemos normalizado los retrasos de los ayuntamientos, pero no de dos años, contando la obtención del CCU y después la licencia de obra, y así es imposible que se decidan a invertir en Valencia», comentan desde la entidad.

El colegio ha tendido la mano al Ayuntamiento de Valencia en varias ocasiones «para ayudar a resolver expedientes administrativos ya que, al ser una corporación de derecho público, tenemos la capacidad legal de poder colaborar con el consistorio para resolver expedientes, como, por ejemplo, compatibilidades urbanísticas de licencia de actividad». «Esto agilizaría el trabajo acumulado de los funcionarios municipales», aseguran desde el colegio. Los ingenieros tienden la mano «a las administraciones como institución y ponemos a su servicio la profesionalidad y la experiencia de sus colegiados».

Los colegios de arquitectos o de aparejadores ya se han dirigido en varias ocasiones al Ayuntamiento para ofrecerles ayuda y para agilizar el plazo de concesión de licencias. Este diario se ha puesto en contacto con la concejalía de Espacio Público, que no ha ofrecido respuesta al comunicado de los ingenieros.

Por su parte, el grupo municipal popular ha denunciado que el Ayuntamiento está «atascado» en todos los sentidos. «Compromís y PSPV han creado un cuello de botella para la actividad económica de esta ciduad», ha afirmado la candidata del PP a la alcaldía, y actual portavoz municipal, María José Catalá, que ha asegurado que resolver el atasco de licencias tanto de actividad como de obras es una de las prioridades que pondrá en marcha cuando acceda a la alcaldía si pasado mañana gana las elecciones. Catalá lamenta la situación que denuncian los ingenieros.

El PP ha recordado que en la actualidad hay más de 7.000 licencias de actividad y de obra atascadas en el Ayuntamiento de Valencia, que «vive de espaldas a la colaboración con los colegios profesionales, que son los que pueden colaborar y ayudar a que esta situación acabe», según ha explicado María José Catalá.

• Temas
• Ayuntamiento de Valencia
• Urbanismo y construcción