Inician la limpieza del vertedero incontrolado de Castellar-l'Oliveral tras la denuncia del Ayuntamiento de Valencia y de los vecinos

Con una máquina retroexcavadora se han empezado a retirar del solar los montones de muebles, colchones, electrodomésticos y ropa apilada, todo ello todavía embarrados tras el desbordamiento del barranco del Poyo, y de inmediato los camiones bañera han procedido a cargarlo todo y a realizar constantes viajes para dejar el espacio, que está rodeado de huerta, en condiciones tras las quejas del Ayuntamiento de Valencia y de los propios vecinos de la pedanía.

De momento, se están empleando dos máquinas y diferentes camiones bañera. El objetico, según indican desde la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, «es retirar residuos extendidos en una superficie de cuatro hectáreas. Se estima que son 3.000 m3 y el plazo estimado para finalizar los trabajos es de dos semanas».

Residentes de la zona como Toni Mocholí, que esta mañana estaba haciendo ejercicio por la zona, ha explicado: «Ya era hora de que nos quitaran estos montones de escombros de aquí, porque cuando sopla viento de mar a tierra, llegan olores al pñueblo». También ha detallado que «ha tenido que salir en presnsa para que nos hagan caso».

La decisión de la retirada del material acumulado se ha tomado en el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) y ha sido encargado por la Generalitat a la empresa pública estatal Tragsa.

La operación se ha calculado que dure dos semana y se va a descargar en dos puntos autorizados de transferencia: uno de ellos en Picassent; y otro en el término municipal de Valencia, pero muy cerca del polígono de Paiporta.

Una vez ya iniciados los trabajos, desde la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio aseguran que han activado la tercera y última fase del Plan de Residuos de la Generalitat, en el marco del 'Pla Recuperem València', puesto en marcha tras las inundaciones con el objetivo de vaciar totalmente los espacios habilitados para albergar enseres y voluminosos de los municipios que sufrieron los efectos de las riadas del pasado mes de octubre.

Aseguran que se pretende vaciar, de manera progresiva, los puntos de acopio local (PAL) y los puntos intermedios de transferencia de las áreas afectadas. En esta tercera fase se cuenta con empresas especializadas en el ciclo integral de la gestión de residuos, desde la recogida, el tratamiento y la eliminación final en vertederos autorizados para su correcto tratamiento, que se suman a los trabajos que realizan otras entidades como Tragsa.

A medida que se avance en esta fase, «se pretende que los servicios municipales, que operaban a través de contratas para la recolección de residuos, retomen su funcionamiento habitual en estas poblaciones, tal como lo hacían antes de la riada».

No hay que olvidar que fue el pasado viernes cuando el concejal de Mejora Climática y de recogida de Residuos, Carlos Mundina, pidió a la empresa pública Tragsa que se encargara de limpiar un vertedero situado en las proximidades de Castellar-l'Oliveral, junto a la carretera del Pi y la acequía del Oro, donde se estaban depositando residuos de la dana provenientes del término de Sedaví.

Se trata de un solar, situado en la carretera del Pi, junto a la acequia de l'Or, donde los Servicios de Recogida de Residuos y de Obras en la Vía Pública del Ayuntamiento de Valencia llevaron, hasta el 9 noviembre, escombros, tierra, lodo y enseres depositados en las calles afectadas por la dana. A partir de esa fecha, según explicó Mundina, «se dejó de utilizar como vertedero y se procedió a su limpieza y al traslado de estos residuos».

Se llegaron a retirar una cantidad aproximada de 2.379 m3 de restos, que se fueron cargando y transportando a la planta de reciclaje y vertedero de Hornillos. En total se realizaron 216 viajes de camión tipo bañera con un cubicaje medio de 11m3/viaje. Desde el 9 noviembre todos los residuos de la Dana de Castellar -l'Oliveral se llevan a la planta de Hornillos.

El problema es que con posterioridad, según fuentes municipales, comenzaron a verter en este solar los residuos procedentes de Sedaví, y llevaban semanas sin retirarse.

Por eso, desde el Ayuntamiento de Valencia aseguraron que ellos habían actuado de manera «diligente y rápida» para limpiar el solar. Sin embargo, apuntó el concejal Mundina, «se han detectado nuevos vertidos de residuos que no provienen de los servicios municipales de la ciudad de Valencia, y que vienen de la retirada de residuos de la dana que está haciendo Sedaví ».

Por eso, Mundina pidió el pasado viernes a los gestores de Tragsa «que se responsabilicen de esta situación, porque es esta empresa pública, dependiente del Estado, la competente de limpiar estos espacios utilizados por otros municipios para depositar los residuos de la dana».

Entonces, el Ayuntamiento ya reiteró su exigencia a la empresa pública Tragsa, para que no se demorara más y limpiara este solar, porque los residuos están provocando malos olores y podría convertirse en un foco de insalubridad demasiado cercano a núcleos de población, y este mismo lunes se ha hecho efectiva la respuesta.