Los nuevos negocios que triunfan sobre ruedas en Valencia

En un recorrido por las calles del cap i casal es fácil comprobar que la movilidad es muy diversa y que las bicicletas y los patinetes cada vez ganan más terreno. Y no sólo eso. Ese cambio también se está traduciendo en la apertura de cada vez más negocios especializados en las bicicletas, incluso con la modalidad eléctrica y de Vehículos de Movilidad Personal (VMP).

Dando un paso más, y visto el nicho de mercado que se va abriendo, incluso se da el caso de tiendas que incorporan ya el servicio de reparación o directamente talleres de mecánica y sobre todo electrónica relacionada con la movilidad sobre dos ruedas.

Un buen ejemplo son las tiendas A-Fix que Iaroslav Tugai ha abierto en varios puntos de Valencia. Su propietario, de origen ucraniano, lleva ocho años en la ciudad y abrió un primer negocio para reparar bicicletas. «En junio de 2017 ya empecé también a reparar patinetes eléctricos. Era algo novedoso entonces».

Con el paso del tiempo ya son ocho las tiendas que prestan este servicio en puntos como Guillem de Castro 51; Avenida del Puerto 25; Cuba 18; Peris y Valero 5 o calle Molinell 1, entre otros.

Iaroslav detalla que en seis años «he reparado unos 50.000 patinetes eléctricos». Las principales reparaciones son los pinchazos de las ruedas, pero también cobra importancia la reparación de las baterías eléctricas e incluso las fabrican, ya que cuentan con profesionales electrónicos. También tienen servicio para crear baterías adicionales para doblar la autonomía y poder circular más tiempo con estos Vehículos de Movilidad Personal.

Recuerdan que los primeros patinetes eran sencillos y «ahora tienen suspensión, luces en la parte inferior e intermitentes».

En el listado de precios que figura en su web figuran servicios como cambiar los asistentes de freno por 12 euros; ampliar baterías desde 150 euros o cambiar la luz trasera por 14 euros.

Argumentan que el auge de los patinetes eléctricos es tal, que ya «se da el caso de casas con cuatro miembros de una familia y con tres patinetes».

Y además de patinetes, reparan bicicletas, hoovers boards (tabla con dos ruedas o aeropatín que llevan muchos niños).

En cuanto al perfil de sus clientes, explican que un 25% son personas que trabajan en el centro de Valencia, principalmente en oficinas y que optan por el patinete eléctrico, ya que es más complicado moverse y aparcar los coches y que hay muchos jóvenes.

Otro caso destacable es el de la firma Smart Ride. José Luis Bau, piloto de aviones de profesión, abrió además en 2017 una empresa de alquiler y tours en patinete eléctrico por Valencia.

Bau añade que ya «los primeros meses detectamos que el nuevo modelo de transporte urbano, a diferencia de la bicicleta, necesitaba un mantenimiento recurrente, por lo que decidimos abrir una nueva línea de negocio dando servicio de asistencia técnica no sólo a nuestros patinetes, también a los cientos de usuarios que se iban sumando».

El crecimiento y posicionamiento en internet es tal que, como explica Bau, «nuestro pequeño taller de 35 metros cuadrados se convirtió en un referente como el primer taller profesional de patinetes eléctricos de Valencia».

En 2018 una gran cadena de venta de aparatos tecnológicos empezó a vender patinetes eléctricos y Smart Ride se convirtió en taller oficial hasta 2020 y desde 2021 se han convertido en el taller oficial de una compañía aseguradora «y damos servicio a toda la península». Describe que se recoge el patinete en casa del cliente «y el proceso de reparación y entrega máxima es de cinco días». Hoy en día reparan unos 900 patinetes eléctricos al mes.

Dando un paso más, incluso ha creado una segunda marca, '99 vatios', especializada en las reparaciones electrónicas y dan servicio mecánico y de baterías.

«Duplicamos baterías para tener más tiempo de autonomía para poder rodar más kilómetros y reacondicionamos también baterías para potenciar la economía circular», añade Bau.

Primero contaron con profesionales de la electrónica de forma externa y ahora «tengo cinco mecánicos y yo como dueño».

Tiene sedes en Peris y Valero 189; en Reino de Valencia 87 y en la plaza de la Merced 2.

Este valenciano tan emprendedor añade que, además, han empezado «un servicio de alquiler de patinetes bajo suscripción. De modo que pagas una cuota al mes por el patinete y el mantenimiento y si un día se estropea, lo recogemos y te enviamos otro mientras lo reparamos».

Detalla que los servicios más comunes son la reparación de pinchazos de ruedas o las holguras que se producen por el uso en el mástil, los arreglos de frenos, de guardabarros o de baterías que se estropean por la lluvia o el duplicado de baterías.

Un tercer caso destacado es el de Restore, tienda ubicada en la calle Linterna 3. Germán Lara narra que empezaron «con negocios de apartamentos turísticos». Como anécdota, cuenta que luego se compró por curiosidad un patinete eléctrico «y fui uno de los primeros en llevarlo en Valencia. Como la gente se interesaba, traje un contenedor con patinetes y empecé a vender en 2017 y también los puse en alquiler en los apartamentos turísticos que gestionaba».

La demanda de servicios de taller y reparación ha crecido tanto, que como describe, «tenemos muchos clientes que son de otras ciudades, porque tenemos servicio de recogida y entrega para repararlos y hay muchas ciudades donde no encuentran ese servicio y me llegan de puntos como Teruel, Castilla León, Zaragoza o el País Vasco».

Incluso indica que también repara patinetes eléctricos para empresas aseguradoras. De modo que ahora combina la venta, alquiler y la reparación. Afirma que en «tres años habremos reparado unos 20.000 patinetes eléctricos». Además, ahora va a ampliar el negocio con la venta de motos eléctricas.

Otro negocio que marcha sobre ruedas es Tot Bikers, en la calle Oltà 30. Se dedican tanto a la venta como taller de patinetes eléctricos y bicicletas. Jorge Valls reconoce que hoy en día «el 90% de las ventas son de patinetes eclécticos». Jorge empezó con la venta de bicicletas y la reparación «y desde 2018 el patinete ha cogido mucho auge. Y en el taller ya supone el 50% del trabajo».

Explica que los clientes de patinetes son gente joven y vende muchas bicicletas eléctricas para clientes de mediana edad. Repara baterías y reparan también muchas ruedas.

En Doctor Waksman se encuentra Eurociclo, un negocio con 30 años de historia. «Comenzamos vendiendo bicicletas y luego incorporamos las eléctricas tanto de paseo, de montaña como de carretera. Tenemos también servicio de taller porque nos formamos con los cursos que daban las propias marcas».

Otra firma que también triunfa sobre ruedas es Bicitaller Russafa, en la calle Sevilla 22. Tomás Mafé detalla que hacen bicicletas a medida. «Hacemos muchas para cicloturismo, diseñamos el cuadro, soldamos las tuberías y las alforjas y hacemos también eléctricas».

También tienen gran demanda los 'minivelos', «que son bicicletas más pequeñas y no plegables. Ocupan poco espacio y tienen más facilidad para subirlas a casa o para ir en el tren de Cercanías». Otra posibilidad con una gama muy variada son las bicicletas de montaña que también cuentan con su público.