Lola Soriano Pons
Valencia
Miércoles, 26 de junio 2024, 00:35
Está claro que los problemas de convivencia en el barrio de Orriols no se arreglan de un día para otro, pero los vecinos no quieren ... que el Ayuntamiento de Valencia baje la guardia y reclaman nuevas reuniones con las distintas concejalías para seguir mejorando la situación del barrio.
Publicidad
Tienen claro que las cámaras de tráfico que instaló el Ayuntamiento en los 'cruces calientes' de la calle Padre Viñas con Agustín Lara y Duque de Mandas, así como en el cruce entre San Juan de la Peña y Santiago Rusiñol para disuadir los actos vandálicos son una medida relevante, pero aseguran que «se están volviendo a producir altercados y peleas», relata Mari Carmen Tarín, de la entidad Orriols en Lucha.
Asegura que afortunadamente «ya no han vuelto a sacar armas, pero se siguen produciendo peleas». De hecho, en un recorrido por el barrio, son muchos los vecinos y comerciantes de la 'zona cero' o más conflictiva del barrio que confirman que el sábado ya hubo peleas «en la calle Padre Viñas. Iban a puñetazo limpio y tuvo que venir la Policía Nacional».
Algunos de los comerciantes explican que ese día incluso se esperaron a que pasara la trifulca para abrir al público sus comercios, para evitar daños mayores.
Este lunes, «a las siete de la mañana también se produjo una pelea. En este caso era gente joven que se ve que venía de celebrar San Juan y junto a la parada del tranvía, en San Vicente de Paúl, empezaron a pegarse, tanto chicas como chicos y se oían gritos de ¡Mátala! ¡Mátala e iban dando golpes a las persianas. Así no podemos descansar ni estar tranquilos, ya que es raro el día que no hay peleas», indica Vicente, un vecino.
Publicidad
Otro problema que no se acaba de resolver es el de la suciedad de las calles. El Ayuntamiento ha reforzado la limpieza en el barrio, se han intensificado las labores, pero aunque ha aumentado la frecuencia de limpieza, las personas incívicas que ensucian las calles no descansan. «Somos conscientes de que todos los días limpian, pero a las pocas horas de que hayan pasado los barrenderos y hayan retirado los trastos, vuelven a tirar de todo en las calles», explica Tarín.
Es habitual ver junto a los contenedores o en medio de la acera sofás destrozados, lavabos o bidés, espejos rotos, neveras, muebles desmontados, mantas, puertas y los colchones desvencijados o sucios son el 'producto estrella' y, si a esto se suma las altas temperaturas que se alcanzan en verano, los malos olores hacen desagradable pasar por estos puntos.
Publicidad
Como relatan los vecinos, la zona entre las calles Padre Viñas, Duque de Mandas, Santiago Rusiñol y Daroca se convierten en vertederos «y hay gente que ni se molesta en depositar la basura en el contenedor. Directamente la tiran en un alcorque, junto a un árbol y hace efecto llamada y la gente sigue tirando botes y restos de comida». Ante esta situación, Tarín, como portavoz de uno de los colectivos vivos que lucha por devolver la normalidad al barrio reclama «que se haga una campaña informativa, para que la gente que tira basura donde le parece entienda que eso no se pueda hacer».
Y añade que si «pasado un tiempo estas personas siguen igual y no paran de ensuciar las calles, pues que se pase directamente a sancionar a los que no cumplan con la ordenanza de limpieza».
También detalla que en la avenida Constitución 262 «todavía quedan varios pisos okupados y en Padre Viñas también hay casos y hay gente problemática».Precisamente para evitar esos retrocesos, desde Orriols exigen que se vuelvan a convocar las reuniones con las distintas concejalías para seguir trabajando en la mejora del barrio, sobre todo para que no haya retrocesos».
Publicidad
La última reunión de trabajo interconcejalías, detalla Tarín, «fue a finales de enero, cuando nos dijeron que cada dos o tres meses se irían convocando. La alcaldesa dijo que se preocupaba mucho por Orriols y que era uno de sus proyectos personales y lo que pedimos es que se vayan avanzando en retos y acciones porque hay margen de mejora».
Y es que no hay que olvidar que en diciembre de 2023, en una visita de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, al barrio lanzó un mensaje muy claro: «Orriols es uno de mis proyectos personales más importantes» para 2024. Entonces dijo que iban a mejorar no sólo aspectos de seguridad, sino otros muchos.
Publicidad
Explicó que ya se habían dado los primeros pasos para la mejora de la limpieza del barrio, el incremento de la seguridad y que estaban trabajando en proyectos de reurbanización y en nuevos espacios verdes, como la supermanzana de Orriols que ya se ha hecho realidad, y en la redacción de proyectos de remodelación de jardines y parques del barrio.
Mejoras ha habido y son palpables con datos que ofreció Catalá, como el hecho de que desde que están instaladas en el barrio de Orriols «se han reducido un 30% los avisos de intervenciones policiales en la zona«.
Noticia Patrocinada
Además, esta semana se están instalando cercas de baja altura junto a uno de los jardines del barrio para evitar que la gente invada la zona verde con coches y disuadir el botellón.
Ahora los vecinos piden que se siga trabajando para que no vuelva a aumentar la frecuencia de las peleas, como la producida el pasado sábado, y que se busquen nuevas estrategias para evitar que la gente convierta las calles en un estercolero.
Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.