![Amparo Peris, en la víspera de la jura, el viernes, en el balcón de su casa de Valencia.](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/201810/21/media/cortadas/amparo-peris-kePF-U601308177548OeB-624x385@Las%20Provincias.jpg)
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marrahí/mohorte
Domingo, 21 de octubre 2018, 12:14
Amparo Peris fue la primera de su grupo en acercarse a la bandera de España con su silla de ruedas. A sus 91 años cumplía un sueño. Casi un deber y un legado. «Primero beso mi bandera y, luego, ya me puedo morir», reflexionaba la mujer esta semana, días antes del acto, cuando la gota fría todavía amenazaba con una posible suspensión de la jornada que, finalmente y para su tranquilidad, se hizo realidad.
Viuda y madre de siete hijos, su vida se desarrolló en Valencia como ama de casa y empleada de una guardería. Su voluntad de participar en la jura es ajena a vínculos militares. «Mi marido llegó a ejercer un tiempo como Guardia Civil, pero poco, cuándo éramos novios. A mi madre no le hacía gracia y él lo sabía. Así que para poder casarse conmigo optó por dejar su carrera» en la Benemérita y cambiarla por la de administrativo en una empresa de transportes.
Amparo, con la memoria anclada por impedimentos de épocas pasadas, «estaba convencida de que éste era el primer año que las mujeres pueden jurar bandera», narra su yerno, Vicente Agustín. «Le hemos explicado, que no, que ya hace tiempo que pueden participar en un acto de este tipo».
¿Qué le mueve? «En casa, mis padres me inculcaron mucho amor a España», describe. Quizá por eso ayer besó la bandera no una, sino «varias veces». «Le falla un poco la memoria y, después de participar ya en la jura, quería regresar otra vez», destacó su yerno Vicente.
Sin embargo, la persona más veterana en el acto fue Pilar de la Torre, de 96 años. A ella correspondió el honor de representar a todos los participantes en el jura para el Homenaje a los caídos, junto a la persona más joven que participó en el acto, Jesús Llorens, y el Teniente General Francisco José Gan Pampols.
«Quería jurar bandera por España», decía Pilar muy emocionada mientras sostenía el ramo de flores que se le había entregado al finalizar el acto. Viuda de Guardia Civil, le acompañaban cuatro generaciones de la familia, siendo una de sus nietas la que empujaba la silla de ruedas y juraba también bandera ayer.
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