El reparto de las dedicaciones exclusivas desata otra polémica en el Ayuntamiento de Valencia

La polémica está servida. El reparto de las dedicaciones exclusivas que llevará la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, al pleno organizativo del viernes, como resolución de alcaldía, no ha gustado nada a la oposición.

La alcaldesa ha concedido a los cuatro concejales que conforman el grupo Vox la dedicación exclusiva, que supone un salario de 68.171 euros, la misma cantidad que recibirán los ediles del PP que sí forman parte del gobierno y que también tienen dedicación exclusiva. En el caso de la oposición, no dispondrán de esta opción todos los ediles, ya que el tope de casos con dedicación exclusiva son 25 y los 13 del PP y 4 de Vox ya suman 17.

La medida ha generado enfado en los grupos de la oposición. Tanto del PSPV como de Compromís, ya que ven una clara muestra de pacto entre PP y Vox. Si bien este tema del enfado por la dedicación exclusiva no es una polémica que venga de nuevo, siempre genera malestar.

Preguntada la alcaldesa por esta cuestión, Catalá ha respondido: «No se le escapa a nadie que Vox es socio preferente de este gobierno porque ha ayudado a sacar adelante el pleno de constitución y, además, ha ayudado a nombrar las presidencias y vicepresidencias de las empresas municipales de la EMT y Aumsa», en clara referencia a que les ha ayudado a sacar a Giuseppe Grezzi de la presidencia de la EMT, donde en 2019 se registró el robo de 4 millones de euros.

Catalá se ha pronunciado sobre los sueldos concedidos a Vox y ha explicado: «No está escrito o fijado en ningún lado quién tiene la exclusividad. Vox es socio preferente de este gobierno y hablaremos con ellos de cuestiones nucleares».

Por su parte, el concejal portavoz del PSPV, Borja Sanjuán ha opinado sobre el tema y ha indicado: «Estamos asistiendo a un engaño que dura dos meses. Seguimos teniendo un gobierno provisional y opaco. Catalá trata de ocultar sus pactos con Vox por las elecciones y antes de entrar en el gobierno ya está poniendo a Vox la dedicación exclusiva».

Además se ha preguntado si se merecen más que los demás miembros de la oposición esta dedicación exclusiva. Se ha cuestionado si «es que exige más esfuerzo levantar la mano a favor del gobierno que en contra».

Incluso ha indicado que primero «Catalá hizo política de gestos, cambiando de sitio a la Virgen, anunciando que recuperaba el Te Deum y tirando una mascletà junto a la Lonja. Luego ha preparado concejalías que parecen un traje a medida de Vox con nombres como 'Familia, Juventud e infancia' o quitando las siglas LGTBI del área de Igualdad y ahora, antes de pactar, les concede la dedicación exclusiva».

Por su parte, el portavoz de Compromís, Joan Ribó, ha explicado que llama «la atención que le dé exclusividad a los cuatro ediles de Vox cuando todavía no están en el gobierno, pero es indicativo».

Ribó ha añadido que a esto hay que sumar el hecho de que por «primera vez en la historia, un gobierno municipal saca a la oposición de la Casa Consistorial y nos envía los despachos a otro edificio y, en cambio, a Vox sí le mantienen su despacho en la Casa».

Ribó ha opinado que se está viendo «cómo poco a poco se va aproximando Vox para que participe en el gobierno y se ha hecho poco a poco porque la proximidad de Vox se ha visto que no mejora el resultado del PP».

Tras la primera junta de portavoces también ha comparecido Juan Manuel Bádenas, portavoz de Vox, quien ha querido dejar claro que no hay ningún acuerdo de gobierno. «De momento no estamos en el gobierno, pero apoyamos cuestiones razonables por el buen funcionamiento de la ciudad de Valencia».

A la pregunta de si están negociando ya para formar gobierno, Bádenas, ha contestado: «Negociar es cuestión de dos, pero no se ha producido y estamos apoyando lo necesario en pro de la buena gestión, para que no se retrase». Eso sí, no ha tirado la toalla sobre un posible pacto de gobierno y ha dicho. «En política no hay nada prácticamente imposible. Seguimos teniendo la mano tendida para conseguir un gobierno estable, eficaz y con mayoría consolidada».

Sobre la cuestión del reparto de despachos y el hecho de que Compromís y PSPV no estén en la tercera planta, Catalá ha respondido que ha aplicado la misma decisión que se toma en Les Corts, «donde se reparten los espacios según el número de diputados y metros cuadrados. Yo estoy tratando mejor a ellos que cuando nosotros estábamos en la oposición y teníamos que compartir el aseo con Ciudadanos y Vox. Ellos tendrán un piso cada uno en un edificio que está al lado del Ayuntamiento, no está en la avenida de Francia, ni en Tabacalera ni hay que coger un taxi»0.

Y ha añadido que el PSPV "dispondrá de una planta completa y tres baños, además de una sala de reuniones de casi 50 metros cuadrados a compartir con Compromís".

Ha insistido en que tendrán el espacio conforme a los metros y la representación y «en la séptima planta de ese edificio tendrán una sala de reunión de uso compartido para PSPV y Compromís».

Tanto PSPV como Compromís han lamentado que se haya reducido el número de comisiones de 6 más la de quejas y sugerencias a sólo cuatro más la citada de quejas y sugerencias, «porque en el PSPV tendremos tres concejales que no tengan asignada comisión», según sanjuán.

Tanto desde PSPV como Compromís aseguran que se reduce «el número de mociones que podremos presentar de 24 a ocho y las preguntas de 33 a 12. Compromís podrá presentar un 33% menos de iniciativas y el PSPV sólo un tercio». Han indicado que se merma la labor de oposición e incluso Ribó ha opinado que al reducir el número de personas representadas de 9 a 7 y el número de comisiones, demuestran que el único objetivo que tienen es trabajar lo menso posible«. Por eso el PSPV ha anunciado que va a elevar consultas a la Secretaria General del Pleno y al Síndic de Greuges.

Por su parte, la alcaldesa María José Catalá ha respondido que el «reglamento de organización del pleno lo aprobaron ellos y vincularon el número de preguntas a las comisiones». Fuentes municipales añaden que entre los años 2015 a 2019 también eran siete los miembros de las comisiones, como ahora.

Además, Catalá ha añadido que han renombrado las concejalías «porque los nombres que habían antes no cabían en una tarjeta de visita, pero en Igualdad defenderemos igual los derechos LGTBI. Hemos respaldado el día del orgullo y estamos haciendo un trabajo ingente con los Gay Game porque se dejaron por firmar el convenio».

Sobre la celebración de los plenos ordinarios el martes último de cada mes en lugar de jueves como hasta ahora, desde el PSPV, han indicado que se debe a que "Catalá ajusta la agenda municipal a la personal, porque el jueves es cuando va a Les Corts".

Por su parte, Catalá ha querido dejar claro que el cambio a martes "se debe porque los miércoles, jueves y viernes hay concejales que tienen que asistir a las bodas y, por ejemplo, este viernes, el pleno de organización tendrá que parar de 12 a 14 horas porque una edil tiene que casar y dificulta las funciones de los concejales" y ha apostillado que ella ha desarrollado "las obligaciones en Les Corts con absoluta solvencia".

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