La respuesta al vertido exige la coordinación de tres administraciones

Para hacer frente a cualquier emergencia se requiere de una actuación conjunta, coordinada y diligente por parte de las distintas administraciones implicadas. En el caso del vertido de fuel que ha afectado a los arenales del Saler, l'Arbre del Gos y Garrofera, las tres situadas en el sur de Valencia y enmarcadas dentro del parque natural de la Albufera, las tres instancias han puesto sus servicios y protocolos para resolver la incidencia provocada por la sustancia contaminante que tiñó de negro la orilla de estos tres enclaves.

La prioridad según comentaban los distintos responsables políticos era conseguir reducir el impacto del vertido acotándolo a su mínima expresión. Es decir que los restos del hidrocarburo no se extendieran más del kilómetro y medio controlado por las autoridades en la costa. La delegada del Gobierno ha comentado que existía el peligro de que la mancha se desplazara hacia el sur más allá del espigón de la gola de Puchol.

Gracias a los trabajos de vigilancia aérea y marítima, el Gobierno decidió el nivel de emergencia del Plan Marítimo Nacional a nivel 0 a última hora de la tarde. Aunque estas mismas fuentes explicaron que se iban a seguir realizando vigilando la costa en busca de posibles restos.

Cabe recordar que tanto el Gobierno como la Generalitat activaron los planes de emergencia relativos a este tipo de incidentes el pasado miércoles y, la actuación gubernamental ya ha sido situada en su nivel mínimo.

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