Ribó todavía no ha iniciado obras en la mitad de los barrios este año

El Ayuntamiento comenzó el año con la lentitud habitual en cuanto a la ejecución de las inversiones en los barrios, pero es que los 80 días de paralización por la pandemia del Covid-19 han convertido las cifras en un drama. En una respuesta del gobierno municipal al grupo popular, el primer trimestre de este año acabó con 5,29 millones de euros gastados en obras localizadas, en lo que supone sólo 44 de las 86 en las que se divide el callejero de Valencia.

El resto no aparecen en el detallado listado donde se comparan los proyectos acabados este ejercicio con el anterior. Las llamadas inversiones territorializables son las más cercanas para los vecinos porque suponen un equipamiento inmediato. El resto son las que abarcan varias zonas de la ciudad o se trata de una inversión general. De estas últimas se han gastado ya un total de 3,1 millones de euros.

La portavoz del grupo popular, María José Catalá, urgió al gobierno municipal a que haga una «revisión de las inversiones previstas para el actual ejercicio presupuestario y priorice aquellas que sean más necesarias y productivas», en clara referencia a los cambios obligados por la pandemia sanitaria.

Catalá destacó que, con la situación actual producida por la crisis sanitaria, «el Ayuntamiento tiene que dar máxima agilidad administrativa a las inversiones productivas y que sirvan para reactivar la actividad económica y crear puesto de trabajo».

Entre las acabadas, en el listado aparecen cuestiones como alumbrado en Ciutat Vella, algunas naves del Parque Central para servicios públicos o la renovación de tuberías en la calle Jacinto Benavente. También un carril ciclista en Maestro Rodrigo, nuevos plazos de la rehabilitación de una antigua aceitera en el parque de Marxalenes.

«Hemos podido constatar los últimos años como el gobierno de Compromís y PSPV no llegaban siquiera a ejecutar el 50% de las inversiones previstas en los barrios. Su inoperancia y lentitud en la gestión ha impedido que se pusieran en servicio nuevos equipamientos públicos y que se deterioran los que están funcionando por falta de inversión en su mantenimiento», destacó.

El pasado año, las inversiones directamente relacionadas con los barrios alcanzaron los 51,24 millones de euros, mientras que con el resto, la cifra global se elevó hasta los 78,5 millones. Este año pinta mal para alcanzar ese nivel de ejecución.

Según la datos ofrecidos por la concejalía de Hacienda no se ha invertido nada en el Pilar, Pla del Remei, la Roqueta, la Petxina, Tendetes, Sant Pau, el Calvari, Trinitat, Morvedre, Sant Antoni, La Fuensanta, La Luz, Patraix, San Isidro, Camí Reial, La Raiosa, Favara, Soternes o Monteolivete, entre otros hasta llegar a 42 zonas de la ciudad. El gobierno municipal está a la espera de que el Gobierno autorice destinar menos dinero a inversiones con los 57 millones que sobraron de las cuentas de 2019.