Urgente Óscar Puente anuncia un AVE regional que unirá toda la Comunitat en 2027
Dos agentes de Policía Local hablan con un vecino de la ciudad. TXEMA RODRÍGUEZ

Robos, reyertas y okupaciones, los delitos que más preocupan en Valencia

Nou Moles, Ciutat Vella, Creu Coberta, Orriols, Benimàmet, Ciutat Jardí o Nazaret reportan un aumento de la delincuencia

Álex Serrano

Valencia

Martes, 7 de junio 2022, 01:04

El aumento de la delincuencia que ha experimentado la ciudad de Valencia con respecto a antes de la pandemia, con un crecimiento del 21% en el número de delitos, se deja notar a pie de calle. No son sólo números en una hoja ... de excel. LAS PROVINCIAS ha preguntado a las asociaciones de vecinos de la ciudad para saber en qué notan este incremento. Los robos, las reyertas y las peleas y las okupaciones de edificios son los delitos más repetidos entre las entidades vecinales, que coinciden prácticamente todas en pedir un aumento de la policía de barrio. Confían, en este sentido, que los nuevos agentes que harán prácticas este verano en el cuerpo de la Policía Local engrosen las filas de esta unidad, muy demandada en casi toda la ciudad.

Publicidad

Nou Moles

«Casi todos los fines de semana tenemos agresiones»

Nou Moles es ese barrio enmarcado por grandes avenidas y el río, lo que se puede decir de otros muchos barrios de la ciudad, pero en este, como en pocos otros, se vive una situación complicada por las noches, provocada, en parte, porque goza de una animada vida nocturna, quizá demasiado para los residentes de la zona, y muy poco común en los distritos situados más lejos del centro o de las universidades. Casilda Osa, presidenta de la asociación de vecinos, ha detectado «más delincuencia y mucha agresividad». «En el barrio han subido los robos en domicilios y en los tres garitos que tenemos hay muchas peleas, con sangre», cuenta la dirigente vecina, que recuerda que casi todos los fines de semana sugren agresiones. «Antes la gente salía y se sentía más segura. Ahora también hay menos Policía, que eso cuenta mucho», comenta Osa. Primera vez que en este reportaje se apunta a la falta de Policía. No será la última.

Ciutat Vella

«Las peleas alrededor del Tosal no son nada infrecuentes»

El centro de la ciudad vive el aumento de la vida en la calle y, sobre todo, del ocio nocturno con cierta preocupación. «Las peleas alrededor de la plaza del Tosal no son nada infrecuentes», comentan desde la Associació de Veïns Amics del Carme. Recuerdan que desde que se decretó parte del barrio como Zona Acústicamente Saturada (ZAS), las normas indicaban que había que aumentar la presencia policial por la noche, algo que no han visto: «Pedimos más refuerzo a la hora de los cierres de los bares para evitar tropelías que se producen: concentraciones de gente armando jaleo o peleas. Es un tema lamentablemente bastante usual». Además, tal como ha podido saber este diario, los vecinos han llevado al Consistorio la problemática que se da en torno al número 27 de la calle Corona, un edificio okupado donde han detectado reyertas, venta de drogas, gritos y lanzamiento de objetos y de basura a la vía pública, así como un crecimiento de los robos en los inmuebles de los alrededores.

Creu Coberta

«Hemos detectado que cada vez entran más a robar a los pisos»

Estos problemas de delincuencia se notan cada vez más conforme más se aleja el foco del centro. La Creu Coberta, de hecho, linda con el bulevar sur. Está lejos de casi todo, lo que es un atractivo para los vecinos, pero también complica, sobre todo, las noches. Elías Sánchez de los Silos es presidente de la Asociación de Vecinos San Vicente-Bulevar Sur y asegura que han detectado «robos en el interior de los pisos». «También es delincuencia romper contenedores o pelearse después de los botellones», critica Sánchez de los Silos, que apunta que tras las fiestas nocturnas «la gente insulta a quienes les llaman la atención desde los balcones». «A la Policía, como siempre, ni se le ve ni hace nada», critica.

Publicidad

Orriols

«Hasta que no se obligue a los bancos a alquilar los pisos okupados...»

En pocos barrios se ha puesto el Ayuntamiento manos a la obra contra la delincuencia como en Orriols, pero también es que en pocos barrios había un problema tan enconado con este tema como en Orriols. Por tanto, queda mucho por hacer. Maica Barceiro, presidenta de la asociación de vecinos, apunta que hasta que no se obligue a los bancos que poseen pisos en el barrio a arregarlos o a alquilarlos, el problema no se solucionará. «Sigue habiendo a pie de calle venta de droga, tirones a gente mayor, robos a chavales...», lamenta Barceiro. «Sigue habiendo pisos usados para esconder a gente, como almacén o tienda de droga y de productos robados», critica la dirigente vecinal, que apunta que la presencia policial sólo retrasa los delitos: «Se van y vuelven a aparecer minutos después».

Benimàmet

«Necesitamos desesperadamente más policía a pie de calle»

En Benimàmet insisten mucho en que no es el peor barrio de Valencia a nivel de delincuencia, «pero pasan cosas», dice de forma sucinta la presidenta de la asociación de vecinos, Mari Carmen Barea. «Los robos siguen existiendo. Ayer me comentaron que en una obra que están haciendo en Felipe Valls intentaron robar y llevarse cosas de obra. También ha habido robos en comercio», explica la dirigente vecinal. «Exigimos siempre policía de barrio, de proximidad. Lo necesitamos. Queremos más vigilancia en el parque lineal», comenta Barea, que recuerda además que este martes se manifestarán por la tarde contra un centro de menores que quiere instalar la conselleria de Bienestar Social en un solar que los vecinos quieren para otros servicios.

Publicidad

Ciutat Jardí

«El verano pasado tuvimos intentos de violaciones... a ver qué ocurre este»

En Ciutat Jardín aguantan la respiración de cara al verano. «Hemos notado un gran aumento de vandalismo», dice la presidenta de la asociación de vecinos del barrio, Xelo Frígols. «Cuando cierran las terrazas, aparecen por el barrio pandillas organizadas», lamenta la dirigente vecinal, que no vincula este problema únicamente al botellón. «Pasa también sin botellón», dice. Con cierto temor, añade que si el pasado verano se vivieron intentos de violaciones, están a la espera de ver «qué ocurre este».

Nazaret

«Se han forzado cerraduras para entrar a comercios y bares»

Nazaret también ha vivido un aumento de la inseguridad. «La semana pasada hubo algunas detenciones», dice Julio Moltó, portavoz de la entidad vecinal, que pone en valor el trabajo de la asociación durante décadas para mejorar la situación de un barrio donde la compraventa de droga era algo habitual hace unos 30 años. «Se han forzado cerraduras para entrar a algún comercio, a algún bar... falta mucha policía de barrio», comenta Moltó. «A ver si nos devuelven los policías locales que faltan en los barrios», indica.

Publicidad

Velluters

«Han llegado hasta a incendiar papeleras de los parques»

En Velluters el aumento del vandalismo y la delincuencia lo han detectado en sucesos extraños, como el incendio de tres papeleras en el parque de Guillem Sorolla, según la secretaria de la asociación de vecinos El Palleter de Velluters, María José Volta, que cree que la ciudad es más insegura. «Hay más gente que se siente con poder, y si lo analizas sólo se puede entender por una falta de respuesta, pero a todos los niveles, no sólo policial», comenta Volta, que lleva años desgañitándose ante la situación que vive el barrio del Pilar, conocido comúnmente como Velluters, sobre todo en lo relativo al consumo de droga y la prostitución.

La Punta

«Han entrado a talleres y autoescuelas de la pedanía»

El presidente de la asociación de vecinos de La Punta, Vicente Romeu, lamenta que suspendieran la primera reunión en dos años con la Policía Local, la Nacional y la Guardia Civil. «Hemos tenido últimamente okupaciones de viviendas, robos en los talleres mecánicos y de gasoil en una autoescuela», critica Romeu, que protesta amargamente siempre que tiene ocasión por el estado de abandono en el que vive esta pedanía del sur de la ciudad.

Publicidad

Es de justicia decir que no en todos los barrios se ha detectado este aumento. No ha pasado así en el Grau, según confirma la presidenta de la entidad vecinal, María Orrit; ni en Malilla, según una de las vocales de su asociación, Tania Cortés. Tampoco en El Palmar, donde de hecho la situación habría mejorado ligeramente con respecto a la pandemia, según la presidenta de su asociación de vecinos, Cintia Sancanuto. En Patraix, el presidente de la asociación de vecinos, Toni Plá, admite que necesitan más policía de barrio, «pero no hay percepción de más criminalidad que antes».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad