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El aspecto de la torre, el túnel y la rotonda que rodea el mirador es de abandono total, repleto de pinturas y basura, mientras Ayuntamiento y Fomento siguen sin ponerse de acuerdo en quién ha de gestionarla. ivan arlandis

De torre de 24 millones a vertedero

Más de una década abandonada. El tiempo pasa, incluso una pandemia, pero nada cambia en la rotonda de la avenida de Cataluña, llena de pintadas y basura

Álex Serrano

Valencia

Domingo, 16 de agosto 2020, 00:24

En una ciudad orgullosa de su pasado, con una importante querencia, en su momento, por los edificios que hendían el cielo y se elevaban verticalmente decenas de metros sobre el suelo, una mancha permanece indeleble en el norte. Una cicatriz de un tiempo ya pretérito que nació bajo una mala luna y a la que el paso del tiempo no le ha beneficiado. Costó 24 millones y ahora es uno de los vertederos más caros del mundo: pintadas y basura se enseñorean de la torre Miramar y la rotonda de la avenida de Cataluña. «Sí, el túnel de la V-21», dicen en el Centro de Control de Tráfico en cuanto en Valencia llueve aunque sea cuatro gotas mal contadas. El acceso por la avenida de Cataluña se agosta y nadie, ni Consistorio ni Ministerio de Fomento, hacen nada por rescatar el mirador que preside, silencioso y abandonado, los campus universitarios y la huerta del norte.

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Pintadas y basura ensucian una rotonda que nunca se usó como jardín, con las fuentes resecas y filtraciones de agua en el túnel inferior. Nunca nadie ha subido al mirador, más allá de los jóvenes que en 2018 movieron por las redes sociales vídeos de exploración urbana donde se les veía encaramarse a una vieja torre que se ha convertido en una carga para las administraciones. Al menos eso parece a tenor de las respuestas que la concejalía de Movilidad da a Ciudadanos siempre que el concejal Narciso Estellés pregunta, la última vez el pasado mes de julio.

2009: año de inauguración de la torre Miramar

La cronología de la historia del mirador se remonta, en realidad, a cinco años antes. En 2004 se licitaron los trabajos. Pero las lluvias posteriores evidenciaron que la obra tenía importantes fallos y en 2014 Fomento realizó reparaciones, aunque el Consistorio nunca ha querido recepcionarlas al considerar que aún hay que hacer reformas. En 2018 Fomento dejó claro en una respuesta al senador de Compromís, Carles Mulet, que el mantenimiento de la torre es cosa del Consistorio, mientras que el Ayuntamiento se lava las manos. Aún no ha recibido un informe sobre el túnel encargado el pasado año.

Su grupo denuncia la falta de interés del concejal de Movilidad, Giusseppe Grezzi, de tener en condiciones y recibir las obras de la V-21 y la torre Miramar. Estado y ciudad no se ponen de acuerdo en quién tiene que gestionar la zona. Movilidad aún no ha recibido un informe sobre el estado del túnel encargado el año pasado. Estellés exigió explicaciones de los motivos del retraso en la recepción de ese documento y preguntó sobre cuándo se le requirió a la contrata de mantenimiento del túnel de la V-21 para hacer el informe de las patologías, como indicó el edil Grezzi en otras respuestas anteriores. Además, Estellés se interesó por saber los motivos de Grezzi para remodelar la rotonda al afirmar que «la considera excesiva». «Y eso nos lo dice al cabo de seis años de estar al frente del área y no haber dicho nada al respecto», indicó Estellés.

«El concejal Grezzi nos dice que no hay novedad respecto a la última ocasión que nos respondió. O sea el informe sigue sin hacerse a pesar de haber transcurrido varios meses. Claro que la hay. Él ahora nos dice que la contrata responsable de hacer el informe del túnel es la encargada de mantener la ronda norte y eso corresponde al Ministerio de Fomento. Y me pregunto a qué espera para reclamarlo y tener en condiciones la rotonda, el túnel y la torre Miramar», explicó Estellés.

Iván Arlandis

Para Ciudadanos «la recepción de las obras de la V-21 se ha convertido en una telenovela de entrega por capítulos al que ahora se añade el de remodelar la rotonda y la entrega de un informe, que no llega. Grezzi lleva seis años al frente de la concejalía y solo se ha hecho un documento cuantificando las obras cifrado en tres millones de euros, o sea prácticamente nada, y todo por nuestra insistencia a través de preguntas y mociones». En noviembre, Movilidad envió al Ministerio de Fomento todos los informes sobre la V-21, la rotonda y la torre Miramar, «pero estamos en agosto de 2020 y el Ayuntamiento no se ha interesado por mejorar la imagen de una de las entradas más importantes de la ciudad», dijo Estellés.

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Cabe recordar que en 2018 Movilidad dijo que Fomento tenía que pagar unos tres millones de euros para arreglar las deficiencias en el túnel y la rotonda. «Estamos abiertos a sentarnos y a hablar del tema para que, una vez se solucionen esos desperfectos, que como son de hace mucho tiempo, nos trasladen la propiedad de la torre y la rotonda», dijo el edil en octubre de hace dos años. «Conocemos el coste para reparar las deficiencias pero nos preguntamos a cuánto asciende el mantenimiento, cuyos trabajos debe asumir el Ayuntamiento cuando reciba oficialmente la obra. Grezzi dijo que informaría de novedades pero sólo da cuenta porque le preguntamos en la comisión. Que no venga con lo de la herencia heredada porque ya forma parte de esa herencia», dijo Estellés. Ciudadanos espera que Grezzi acelere las gestiones en Fomento para conocer si el ascensor reúne condiciones o no para su apertura al públio.

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