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Desde el pasado 13 de marzo medio millar de locales de hostelería han ampliado o abierto terrazas en la calle. Es el balance que ofreció ayer la concejala de Espacio Público, Lucía Beamud, a la presidenta de la Federación de Vecinos, María José Broseta, en una reunión donde la entidad vecinal demandó a la primera adaptar las autorizaciones a la «nueva normalidad».
El medio millar de autorizaciones concedidas se reparte entre las 304 que se acogieron al decreto del Ayuntamiento para la ampliación de superficie, otras 52 que ya tenían permiso, pero no habían agotado la superficie con la ordenanza vigente, así como 141 permisos de mesas y sillas desde que se aprobaron las medidas de agilización de permisos, precisaron fuentes cercanas a la concejalía. En total, 497 autorizaciones sobre las 3.500 que se contabilian en la ciudad.
La ampliación de terrazas por el Covid-19 se mantendrá mientras esté vigente la obligación de una distancia social, señalaron las mismas fuentes. Por el contrario, el vocal de la Federación Antonio Cassola, presente en la reunión, indicó que se reivindica una adaptación de este permiso a la última normativa del Gobierno. La premisa será siempre «garantizar al viandante su derecho a la movilidad sin que suponga un riesgo de contagio«.
El gobierno municipal aprobó una serie de condiciones para ampliar la superficie de las terrazas en las aceras y zonas peatonales, aunque la Federación quiere ahora revisar todos los artículos con el «punto de vista del viandante», en referencia a que se muestran convencidos del incumplimiento de la distancia mínima en muchos casos.
En el encuentro no se detallaron aspectos como la anchura de paso, señalaron. La normativa provisional en vigor habla de que la banda peatonal debe ser de 1,50 metros respecto al mobiliario urbano y el acceso a las plazas de aparcamiento, además de 1,80 metros en el caso de una parada de la EMT.
Esto es lo que quiere revisar la Federación de Vecinos en próximos encuentros. «La concejala nos ha dicho que tendrá encuentros con otros sectores sobre el mismo tema», precisó. La postura de la federación es de momento más suave que la de algunas asociaciones socias, como por ejemplo Amics del Carme, que rechazan los parámetros utilizados en la orden provisional al considerar que laS referencias sobre los aforos son erróneas.
Una de las posibilidades de los hosteleros es pedir la autorización para colocar las mesas y sillas en la calzada, en el caso de que la acera no dé las medidas suficientes. Este es una de las opciones que quiere profundizar la federación, al comentar Cassola que la prioridad es «siempre el viandante, no el peatón porque no no se trata de ponerlo en confrontación con el tráfico, sino que los vecinos tengan la seguridad completa de movilidad sin riesgo en los barrrios y el centro histórico de la ciudad».
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