El Ayuntamiento de Valencia prohíbe al Puerto utilizar la red de alcantarillado municipal

Elisa Valía se ha cansado. La concejala de Ciclo Integral del Agua ha prohibido este jueves al Puerto de Valencia que utilice la red municipal de alcantarillado. Desde este jueves ya no puede verter nada a la misma. De hecho, ahora tendrá que gestionar sus residuos almacenándolos y sacándolos con cubas. También podrían recuperar el acceso a la red si depuraran los vertidos antes, según ha informado la propia concejala.

Y es que algo huele a podrido en Nazaret. Literalmente. La asociación de vecinos del barrio había denunciado este mismo jueves que se repiten las emanaciones de ácido sulfhídrico en el alcantarillado del Puerto sin que la Autoridad Portuaria de Valencia «solucione el problema», según ha explicado la entidad en un comunicado.

«Varias personas del barrio nos alertaron del olor a gas en el entorno del puente de Astilleros en días anteriores», comenta la entidad. El olor del ácido sulfhídrico es muy característico: se parece mucho al de los huevos podridos. «El miércoles 25 de mayo también se detectó en la Unidad de Análisis de Sanidad Animal en la calle Ingeniero Manuel Soto 18, donde el laboratorio de Acciona contratado por el Consistorio habría detectado valores altos de ácido sulfhídrico en la conexión del alcantarillado portuario con el municipal», explican desde la asociación.

Según la información de los vecinos, el laboratorio desalojó a su personal, cerró ellas instalaciones el 17 de marzo y no volvió a reabrir hasta el 28 de dicho mes. Sin embargo, los técnicos municipales tenían problemas para hallar este gas en el punto de conexión entre ambos alcantarillados cuando iban los técnicos municipales. Finalmente, avisaron al Puerto con escasos minutos de antelación y hallaron los datos. La APV se expone ahora a una sanción que puede llegar a los 3.000 euros por vertidos ilegales.

«Denunciamos la ineficacia de las medidas tomadas por la Autoridad Portuaria, el Ayuntamiento y la propia Generalitat para dar solución a este grave problema de salud pública que se reproduce periódicamente ante la negativa del puerto a construir su propia depuradora», ha denunciado la entidad este jueves.

Los vecinos han exigido explicaciones de lo ocurrido y han alertado de lo que ocurrirá si, finalmente, se da la ampliación del Puerto de la que están en contra: «Reclamamos medidas que corten de raíz el problema que se agravará si finalmente el puerto duplica sus instalaciones».

Esas medidas han llegado. En una comunicación firmada en la mañana de este jueves por la concejala de Ciclo Integral del Agua, el Consistorio corta del grifo al Puerto tras detectar que están realizando vertidos «con valores de ácido sulfhidrico que superan los que marca la norma». «Es intermitente y no consiguen determinar la causa o el origen», ha explicado Valía.

Cabe recordar que el Puerto sí podía hacer uso de la red municipal «siempre que los niveles de ácido sulfhídrico fuesen los correctos, pero ahora mismo consideramos que no es capaz de garantizar que los vertidos se realizan siempre dentro de lo que marca la norma». «Hemos estado trabajando con ellos para explorar medidas que podían poner en marcha. Han hecho algunas cosas, pero no han terminado de funcionar», ha indicado la concejala.

«Son medidas que deben decidir e implementar ellos, porque el problema es en la red interior de la APV», ha señalado. Se refiere la edil socialista a limpieza y revisión de instalaciones y reparación de la bomba de impulsión, pero estas medidas no han surtido efecto. La concejala abre la puerta a que la APV recupere el acceso si solucionan los problemas y ellos lo comprueban «en el marco de colaboración que tenemos para poner solución», según Valía: «Aunque es responsabilidad única de la APV, en el Ayuntamiento nos reunimos con ellos para aportar soluciones, en el plano de las ideas».

Según han explicado fuentes de la Autoridad Portuaria, están en búsqueda activa de una solución. El problema que ha habido esta semana es que se ha averiado el compresor que tira oxígeno a la tubería. «Lo lamentamos mucho», han indicado desde el Puerto: «Trabajamos para buscar un proyecto nuevo y cambiar toda la tubería».

Tal como han comentado desde la APV, el problema se dio entre las 7.30 y las 10 horas del pasado miércoles. «El comprensor se rompió. Eso provocó que las partículas por millón fueran superiores a las 20ppm, que es el tope legal», han señalado. Ahora mismo, el problema ya está solucionado: «Se están registrando valores de entre 1 y 4ppm, muy por debajo de los niveles máximos». Sin embargo, el problema es que «justo en ese momento» se estaba haciendo una inspección. «Fue mala suerte», han lamentado desde la Autoridad Portuaria.

«Hay un problema de ventilación de las tuberías», han reconocido las mismas fuentes, que han explicado que van a ponerse «bombas de impulsión de aire para que esté siempre refrigerado». «También vamos a probar con nitrato cálcico para anular la acidez», han comentado desde el Puerto. «Trabajamos por una solución definitiva que incluya en algún caso cambio de tuberías», han explicado. Fuentes de la concejalía de Ciclo Integral del Agua han asegurado que los técnicos monitorizarán los cambios, pero no creen que el cambio del compresor sea suficiente: «El problema no ha surgido esta semana. En principio, no parece que la causa sea esa».

Según fuentes conocedoras, el ácido sulfhídrico se genera por fermentación anaérobica de los residuos. Ante la falta de oxígeno, el gas aparece. Aunque tiene un olor muy característico, es también peligroso porque en concentraciones elevadas «te duerme el olfato y no te das cuenta», según ha indicado un técnico en riesgos laborales especializado en depuradoras ha explicado a este diario, que ha añadido que está obligado a instalar «controladores de atmósfera een espacios cerrados» porque el gas, en concentraciones elevadas, puede ser perjudicial para la salud. Es algo que es «casi imposible» que se llegue a dar al aire libre y en un espacio abierto.

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