La reforma de la plaza de la Reina se aprueba a tres días de las elecciones

Quince meses después de su presentación en sociedad y a tres días de las elecciones municipales, la comisión de Patrimonio dictaminó este jueves a favor del proyecto de reforma de la Plaza de la Reina de Valencia. El «parto» ha dejado el diseño redactado por los arquitectos José María Tomás, Antonio Escario y María Antonia Izquierdo prácticamente igual que entonces, aunque con sutiles diferencias que pretenden despejar más el entorno de la Puerta de los Hierros, evocar de alguna manera en el pavimento los hallazgos arqueológicos romanos que se encuentren y aumentar el arbolado.

Esas son algunas de las cuestiones novedosas, comentó ayer a LAS PROVINCIAS el arquitecto José María Tomás. «El encuentro con la Catedral se ha cambiado», indicó, para señalar que el arbolado se incrementará «en la medida de lo posible, dada la presencia del aparcamiento subterráneo». Este parking se verá también afectado por la remodelación, con una reducción de plazas para cumplir la normativa, así como la introducción de cargadores para coches eléctricos o espacio para bicicletas, entre otros cambios.

Pero la modificación más relevante será el traslado de la rampa de acceso, ahora en el centro, a un lateral próximo a la calle del Mar. Toda la plaza quedará peatonalizada, permitiendo la entrada desde la calle de la Paz al citado parking. También habrá otra ruta desde la calle Corretgeria. Salvo esas circunstancias, predominarán las zonas de descanso, los jardines y los toldos desplegables que darán sombra en verano.

Los 9,8 millones de euros de inversión que se estiman necesarios formarán parte del nuevo mandato, con unas obras que se desarrollarán a lo largo de un año. Cuando salga el pliego de condiciones del concurso, será el momento en que el Ayuntamiento clarifique el cronograma de los cortes de tráfico.

Hay que tener en cuenta que esta plaza acoge numerosos eventos públicos, sobre todo procesiones y el paso de miles de falleros durante la Ofrenda. Todo eso queda respetado en el diseño, incluso un pavimento especial para la cremà de una falla o el recorrido del Corpus, por poner dos ejemplos claros.

Para Tomás, uno de los beneficios más importantes es que la plaza de la Reina «dejará de ser una estación de autobuses». Todas las paradas de la EMT serán trasladadas al entorno, lo que ya se hará durante las obras. A falta de que la empresa tome la decisión final, todo apunta a que las líneas pasarán por la calle Marqués de Dos Aguas o se quedarán en la plaza de Tetuán.

Las propuestas de la comisión han servido para adecuar el proyecto al Plan Especial de Protección de Ciutat Vella. Junto a la Catedral se ha modificado la disposición de colores del pavimento. Finalmente, las pérgolas desmontables en el centro de la plaza serán cuadradas. La plaza contará con 115 árboles frente a los 53 actuales, lo que generará, junto a los citados toldos, una sombra de 1.317 metros cuadrados, lo que supone un incremento del 419% sobre la sombra actual.