Las calles de Valencia: Desde el Gobernador Viejo hasta Santiago Calatrava

Pues para guardar memoria de cada una, de su nombre y de cómo la historia lo imprimió sobre los muros de Valencia ha llegado el ingeniero técnico en Topografía Luis Fernández (Valencia, 1979) y su libro 'Toponímia i Memòria urbana', obra editada por el Ayuntamiento de Valencia que se presentó este martes al público como «una herramienta fundamental para comprender las sociedades en momentos históricos concretos», tal como señala Luis Fernández Gimeno en la introducción del libro que lleva como subtítulo «La configuració del nomenclàtor de carrers de València (1812-2019)».

Las páginas ofrecen un apasionante paseo por la capital del Turia desde el siglo XIX hasta casi el otro día, 2019, que discurre por los rótulos de calles de insigne nombre desde la del Gobernador Viejo, Quevedo, Vergara, Valeriola, Guillem de Castro, Muñoz Degraín, Mastro Chapí, Poeta Llorente, Navarro Reverter, Martí, Martínez Cubells, Periodista Azzati, Pintor Sorolla, almirante Roger de Lauria, Ribera, Duque de Calabria, María Cristina y un extenso listado que alcanza hasta la actualidad para dar con nombres ligados a la Valencia de última hora como es el caso de Santiago Calatrava que tiene calle en su patria chica, la pedania de Benimamet.

Son nombres con historia que impresos en azulejo, mármol, cerámica, escayola o incluso metal invitan a conocer la historia y descubrir la razón que un día les elevó a la categoría, que no es poca, de rótulo de calle. No faltan esos nombres variados que sin duda llaman la atención del curioso que querrá conocer más. Ahí están las calles Cabrito, Abate, Buenavista, Turia, Progreso, Poesía, Fotografía... Y se suman los rótulos que hablan de tiempos de atención religiosa con calles como Arzobispo Olaechea, San Pío X, Virgen de la Salud, Virgen de las Injurias, Virgen de la Salud, San Mateo, Cueva Santa, y tantas más.

El autor de 'Toponímia i memòria urbana' ha investigado minuciosamente la nomenclatura de las vías del trazado urbano en distintas etapas de la historia guiado, como se desprende de la introducción, por el interés de que «conocer nuestra ciudad bajo el hilo conductor de los nombres de sus calles para aprender a amarla y a comprendernos mejor». Todo empieza con la Constitución de 1812 y el Estado Liberal para seguir con la Restauración, el Blasquismo, la República, el Franquismo y la democracia desde 1979 hasta 2019.

Siguiendo el mapa de las épocas, el lector avanza su paseo urbano por los nombres que cada momento ha dado a las calles y se encuentra con esos pueblos que como Estubeny, Anna, Loriguilla, Burriana, Benicolet, Puzol, Benaguacil y muchos más, un día se ganaron un puesto de altura en la capital. Y avanza el camino a recorrer hasta dar con la nomenclatura de última hora en la que se descubre, entre otros rasgos de la sociedad, que la mujer también rótula la ciudad con nombres como el de María Fernanda d'Ocón, Gloria Fuertes, Guillermina Medrano o Marie Curie. El de Luis Fernández Gimeno es un periplo trazado a partir de documentos del archivo municipal y numerosas fotografías de distintos autores que no sólo reproducen los rótulos, también grandes momentos que han marcado inauguraciones de calles y plazas.