
María Gardó
Miércoles, 6 de enero 2016, 11:25
El fútbol, a veces, brinda situaciones paradójicas. Rafa Benítez, el entrenador de las dos últimas Ligas y una UEFA blanquinegras, regresó a Mestalla este domingo once años después de convertirse en un héroe para el Valencia. El estadio donde vivió algunas de sus mayores glorias deportivas, le homenajeó en mitad de su peor momento profesional. El contraste fue llamativo. Mientras en el Benarbéu se le silbaba y cuestionaba en cada partido, el coliseo valencianista le recibió con tres pancartas, la más llamativa rezaba: «Rafa, nos regalaste los mejores años de nuestras vidas. Gracias». Un día después era destituido como técnico del Madrid con una escueto agradecimiento por parte de Florentino.
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La tensa relación del entrenador con los jugadores del Madrid y la afición le ha llevado a despedirse con un comunicado a través de su página web.
Las comparaciones son inevitables y muchos valencianistas han recordado estos días la emotiva despedida del técnico en junio de 2004 en Mestalla. Aquel año, el Valencia vivió su año más glorioso, el del doblete. El método y trabajo de Rafa Benítez convirtió al equipo en un conjunto sólido y ganador. En mitad de la euforia de los triunfos, el entrenador anunció su marcha. La afición coreaba su nombre en cada partido y celebración, pero aquello no evitó su marcha al Liverpool.
Así llegó una de las ruedas de prensa más emotivas que se recuerdan. «Posiblemente he tomado la decisión más difícil de mi vida deportiva. No voy a continuar en el Valencia la próxima temporada», comenzó leyendo Benítez en sala de prensa. Seguidamente agradeció el apoyo recibido durante sus tres años de estancia en Valencia «a los jugadores, empleados del club, medios de comunicación y, especialmente, a la afición...». Al llegar a este punto no pudo continuar y entre lágrimas dejó la sala de prensa, acompañado por sus ayudantes en el cuerpo técnico.
En el resto del comunicado, que no consiguió terminar de leer, señalaba: «Tengo dos hijas, una es valenciana y las dos son falleras, por lo que Valencia y el Valencia siempre estarán en mis pensamientos y en mi corazón, gracias a todos, mucha suerte y amunt Valencia».
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