Almeida, el gran tesoro para Carlos Corberán

El entrenador mima a Almeida. Al configurar sus alineaciones y en la sala de prensa. Para el preparador de Cheste, el portugués es «único» en la plantilla de este Valencia y por el momento lo considera básico en el objetivo de sellar la permanencia. Así lo ha demostrado en los dos partidos de liga en los que se ha sentado en el banquillo valencianista y en otros tantos de eliminatorias de Copa.

Pero quizás donde lo dejó más claro fue en la sala de prensa de O Couto, avanzar frente al Ourense a los cuartos de final del torneo del KO. «Tratamos de sacar el máximo provecho de los futbolistas. Él es un jugador único en su posición y en sus capacidades, ayuda y mejora las jugadas, no siempre va a tener finalización pero ayuda. Veo a Almeida muy competitivo, con muchas ganas de ayudar al Valencia», afirmó el técnico.

Corberán mima a un futbolista que ha sido titular en sus dos partidos de Liga, Real Madrid y Sevilla. Y como el fútbol es así de caprichoso, en ambos casos el desastre para el Valencia se ha desencadenado ya sin el portugués sobre el terreno de juego. El tanto de Modric en Mestalla sí llegó con Almeida sobre el césped, pero no el sonrojante 1-2 de Bellingham tras un fallo clamoroso. Tampoco estaba ya el luso sobre la hierba del Pizjuán cuando el Sevilla igualó por el sorprendente fallo de Mamardashvili.

En Copa, en cambio, Corberán ha decidido por ahora dar descanso a Almeida. Tanto en Elda, donde echó mano de un once con más teóricos titulares, como en Ourense, encuentro en el que sí introdujo alguna rotación. En la cancha alicantina concedió al portugués 32 minutos y en tierras gallegas todavía menos, 12 más el añadido, para sustituir a un buen Martín Tejón.

El rol de Almeida es cierto que empezó a cambiar en el final de la etapa de Baraja. El vallisoletano, cuando trataba de dar un golpe de timón que recondujera al Valencia antes de ser destituido, sí echó mano del portugués: lo alineó contra el Espanyol y el Alavés, el que fue el último encuentro del técnico pucelano. Para el anterior preparador, el luso pasó a tener un rol secundario desde finales de agosto, y prueba de ello es que sí lo introdujo en el once inicia en Copa ante el Ejea.

Ahora el futbolista debe dar rendimiento ante esa confianza que le ha otorgado Corberán. De momento no ha dado ninguna asistencia ni ha marcado en lo que va de liga. Por el momento ha disfrutado de 858 minutos en el campeonato de la regularidad, donde ha realizado 371 pases, 11 de ellos en largo y 3 al hueco. En tareas defensivas ha realizado 38 recuperaciones.