Amallah se acerca al Valencia y Yunus al Milan

El Valencia trabaja en el mercado con la premisa de que debe dar prioridad a las salidas para poder atar los fichajes, esa es la consigna que confirmó Peter Lim en la última reunión telemática del consejo, pero no puede dejar el trabajo de las entradas supeditado a las ventas. Todo tiene que estar preparado para poder firmar los refuerzos que necesita la plantilla de Baraja para poder afrontar la temporada con más garantías. El acuerdo más cercano es con Selim Amallah. El internacional por Marruecos, que cuajó un gran Mundial en Qatar, es el elegido para apuntalar el centro del campo valencianista, como complemento a Pepelu y Javi Guerra.

El acuerdo con el jugador está cerrado a falta de que entre los clubes se pueda llegar a un entente. La clave está en la opción de compra que el Valencia quiere poner en la cesión del futbolista, ese sería el formato de su llegada, y el conjunto pucelano quiere aumentar su valor en el caso de aceptarla. Fuentes conocedoras de la operación son muy optimistas con respecto a que el acuerdo se firme. Amallah llegó al Valladolid en el mercado de invierno, procedente del Standard de Lieja con el que se negó a renovar, y con una cláusula en el contrato que estimaba que en caso de descenso a Segunda, como así sucedió, podía salir cedido a un club que igualara su salario. Por contra, si el Valladolid asciende a Primera, tendría que regresar. Es por ello que el Valencia quiere incluir esa opción de compra en su contrato, se está negociando en 10 millones. Algo que no asegura, para nada, su futuro porque debería tener el visto bueno de Lim para ejercerla.

El Valencia inscribió este martes a Pepelu y Cenk en la Liga, como curiosidad llegó sólo unas horas después de que este periódico apuntara que aún no habían sido inscritos pese a estar fichados hace varias semanas, con lo que tiene a 21 futbolistas con ficha profesional para comenzar la temporada. Ahí están incluidos los cinco descartes de Baraja para el stage en Suiza que ya ha terminado y Yunus Musah. La salida del internacional por Estados Unidos apunta a la más inminente. Sólo hace falta que el Milan suba su segunda oferta, de 17 millones, a un mínimo de 20 que es lo que pide el Valencia para comenzar a negociar un traspaso. El equipo rossonero ya ha llegado a un acuerdo con el jugador, que sólo entrenó en una sesión de las cuatro pautadas en territorio suizo. Su venta sería un soplo de aire fresco para el Fair Play, recordemos que es un jugador sin amortización y canterano, y permitiría comenzar a cerrar más fichajes. Además, deportivamente sería la menos lesiva para Baraja (Mamardashivili por contra es un fijo en el once) puesto que el tramo final de la pasada temporada, con la amenaza del descenso, tanto el rendimiento como la actitud de Yunus no gustaron al cuerpo técnico.

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