Lim llama a capítulo a Murthy

La reunión, esté planificada o no, no llega en buen momento para la figura de Anil Murthy puesto que a buen seguro que le tendrá que hacer al jefe un análisis de la fotografía a la que no se puede contestar con un comunicado, la de las gradas de Mestalla casi vacías mientras se juega un partido y la Avenida de Suecia con un lleno. Las cifras oficiales de los tornos tampoco le servirán de escape a Murthy, puesto que si 16.189 personas entraron a Mestalla lo único cierto es que muchos miles lo hicieron para que les contara la asistencia en el descuento del pase antes de salir a protestar a la calle contra la gestión de Meriton.

Lim deberá transmitir a Murthy las instrucciones para ejecutar el noveno proyecto de Meriton al frente del Valencia y, además, la fórmula para cerrar el octavo con la menor sangría posible. Lo que queda claro es que la temporada 21-22 dará pérdidas por séptimo año de los ocho con Meriton al frente. Hasta la fecha, el contador oficial es de 135 millones de pérdidas acumuladas en los ejercicios. El presupuesto aprobado en la última junta fue demoledor, puesto que estimó pérdidas de 36,6 millones con un beneficio neto de venta de futbolistas de 37,7. Es decir, que sin vender activos el agujero previsto de la temporada es de 74,3 millones. Sin ingresos por competiciones europeas, el pequeño arañazo a los ingresos televisivos con el Valencia noveno, el pasado curso fue decimotercero, no liberará al club de vender. Murthy dará buena cuenta a Lim de la reunión de la pasada semana con Joan Laporta en Barcelona, con los nombres de Carlos Soler y Gayà encima de la mesa. Sin cantidad a amortizar, serían dos ventas limpias de beneficios.