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Giménez y Cavani se encaran con el árbitro. reuters

Cavani, de récord pero cabreado

El Matador se expone a una sanción de la FIFA aunque no afectará al Valencia| Gattuso recuperará antes de lo previsto al punta, que se va de Qatar siendo el jugador uruguayo con más partidos disputados (17) en citas mundialistas

Domingo, 4 de diciembre 2022, 00:06

Al mediodía Marcos André metía tres goles en el primer amistoso que jugó el Valencia en este atípico periodo prenavideño y pocas horas más tarde ... Edinson Cavani hacía las maletas para abandonar Qatar antes de hora (ayer le tocó hacerlas a Yunus Musah). La felicidad del brasileño contrasta evidentemente con el monumental cabreo y decepción que se llevó el Matador, que además de pasar a la historia por ser el jugador uruguayo con más partidos en citas mundialistas (17) será recordado por el penalti que le birlaron, por la bronca con el colegiado y por golpetazo que le dio al apartado instalado del VAR que terminó en el suelo. Cavani la lió bien gorda cuando el árbitro pitó el final del partido. Con Uruguay exasperada por ser eliminada del Mundial a las primeras de cambio, Cavani –como también el atlético Giménez– descargó su ira contra Daniel Siebert, que apenas unos minutos antes había pasado por alto un derribo sobre el propio valencianista en el área ghanesa. De haberse pitado el penalti y de haberlo marcado –lo hubiera tirado Cavani–, Uruguay se habría clasificado para octavos. Pero pasó justo lo contrario y el delantero, cuando se dirigía a los vestuarios, nada más abandonar el terreno de juego, le dio un golpe al monitor del VAR. Desde la selección uruguaya asumen que la actitud de los dos jugadores acarreará una sanción económica –que pagará la Federación– y que a estos se les aplicará un castigo deportivo que en el caso de Cavani no parece que vaya a afectar al Valencia, ya que se aplicaría en todo caso a los partidos que pudiera disputar con la camiseta uruguaya.

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Es más, con Cavani la sanción quedaría en el limbo porque esta cita en Qatar ha significado su adiós como internacional y también el de una generación en la que entre otros están Luis Suárez, Godín, Muslera y Martín Cácerez. Precisamente, esos minutos que disputó Cavani en este último encuentro supusieron que el Matador se colocara al frente el ranking de partidos disputados en mundiales con la camiseta uruguaya, uno más que Luis Suárez, Godín y Fernando Muslera (todos con 16).

De ese penalti que no le pitó el colegiado ni el VAR en el 92' se hablará bastante todavía cuando llegue a Paterna. De momento tendrá unos días de vacaciones –que todavía el club no concretó– antes de reincorporarse al trabajo. A Gattuso le espera pues una labor interesante para recuperar anímica y físicamente al uruguayo (como al resto de mundialistas). De hecho, y según reconocía el entrenador semanas atrás, lo peligroso y difícil llegará precisamente después del Mundial, por la alteración que esta competición ha supuesto y la complejidad a la hora de tratar cada caso físicamente.

De cualquier forma, a Gattuso lo que le interesa verdaderamente es que Cavani regrese dispuesto a enchufarse lo más pronto posible. Las molestias en su tobillo, sobre el papel, parecen estar totalmente olvidadas. Y es probable que al futbolista no le afecte mentalmente la posible sanción que le puede aplicar la FIFA por su agresiva actitud tras este encuentro. De cualquier manera, habrá que esperar el dictamen de la FIFA. Una infracción grave (como la que sufrió Luis Suárez en 2014 y como podría aplicarse esta vez al atlético Giménez), sí que afecta a la competición con los clubes ya que Suárez estuvo cuatro meses sin jugar.

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Tres partidos de castigo en la Premier por llamar a un amigo «negrito»

Cuando estaba en las filas del Manchester United, Edinson Cavani fue sancionado por la Federación Inglesa con tres partidos de suspensión además de pagar una multa de 100.000 libras por una publicación en su cuenta de Instagram en la que llamaba «negrito» a un amigo suyo. La FA consideró que esa expresión iba en contra de las normas de la competición por ser un expresión «insultante, abusiva, inapropiada y que desprestigia el juego», además de suponer una «infracción agravada» porque incluía una referencia «al color y/o raza...». Cavani se disculpó.

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