Cinco finales para no perder dos categorías de un zarpazo

La situación del Valencia Mestalla preocupa. Quedan 5 jornadas de competición y el filial blanquinegro corre serio peligro de descender a Tercera y este año, tras la reestructuración derivada de la pandemia (se crea una categoría entre Segunda y Segunda B), esto podría suponer hundirse hasta la quinta categoría del fútbol.

Óscar Fernández volvió este verano a casa. Llegó con la confianza que se le tiene a una persona que conoce la ciudad deportiva de Paterna como la palma de su mano y que lleva colgado un cartel de «entrenador milagro» que se ganó en la cantera del Atlético. Por delante tenía un triple reto. En primer lugar, levantar el ánimo a un filial a quien sólo la decisión de la RFEF de suspender la competición y los descensos le salvó de bajar en 2020. Y, por otro lado, asumir el papel que debe tener un filial: formar futbolistas para suministrar de efectivos al primer equipo.

Mientras, Peter Lim desintegraba la plantilla de Javi Gracia y el preparador no tuvo otra que tirar del filial. Óscar Fernández, a su vez, hizo subir hasta a 9 futbolistas con edad de militar en juvenil. Anil Murthy ha presumido de cantera durante los últimos años. Pero si se quiere una Academia productiva se debe cuidar. No todos los futbolistas están tocados por la varita mágica como Ferran Torres. La mayoría de los jugadores necesitan completar etapas y así triunfar en la élite. Y si ya es complicado para futbolistas como Hugo Guillamón o Álex Blanco dar ese salto de la categoría de bronce del fútbol español hasta Primera, ni qué pensar qué puede sucederles a chavales que compitan en dos categorías por debajo. Si no que le pregunten también a Yunus Musah o Vicente Esquerdo, entre otros.

No tuvieron suerte los chavales con el sorteo y tampoco con los arbitrajes. Para muestra, el último partido de liga en el que el Orihuela se llevó un empate en el último suspiro y en unas circunstancias muy discutidas por los valencianos. No es la primera vez que el enfado con los colegiados aparecía en la campaña. Han sufrido 5 expulsiones. Son los más sancionados de la liga. Pero no hay tiempo para lamentaciones, este fin de semana el equipo se desplaza hasta las Islas Baleares para enfrentarse al líder. El Ibiza de Amadeo Salvo no tuvo rival en la primera vuelta en el Antonio Puchades (quedaron 0-4).

En el último partido, ante el Orihuela, el once inicial del Mestalla estuvo formado por Etxebarria, Mingotes, Facu, Vázquez, Menargues, Esquerdo, Adri Gómez, Gozálbez, William, Fran Navarro y Emaná. Cuatro de estos chavales no son de la cantera. El club ya recurrió al mercado en verano para sumar algo de experiencia, aunque fuese en calidad de cedidos, y en esta ventana de invierno se ha vuelto a reforzar para intentar darle ese empujón que necesita el equipo. Lo ha hecho con tres hombres.

Bashiru Mohammed fue la primera incorporación. Un delantero de 18 años muy prometedor que estaba dejando muestras de calidad en División de Honor Juvenil con el Talavera. Aunque en principio es una incorporación para Miguel Ángel Angulo, lo normal es que vaya acumulando minutos en el filial. Cedido con opción de compra llegó del Leganés (aunque estaba jugando en el Cartagena) un extremo brasilleño, William Camargo, titular la semana pasada. El último en reforzar a los de Óscar Fernández es el también atacante francés Fadiga Ouattara. Tiene 19 años y era la perla del Lille. El Valencia tiene una opción de compra sobre él. Y en la llegada del ariete tuvo mucho que ver que su agente sea Momo Sissoko, exfutbolista blanquinegro que seguro que le habló al chaval del caché de un club centenario como es el Valencia. En su acierto, entre otros, estará el devenir del filial.