El cliente favorito de Meriton

El Valencia visita el estadio de Balaídos en un encuentro clave para las aspiraciones de permanencia del conjunto de Mestalla enfrentándose al Celta de Vigo, un rival ya clásico en Primera División. De hecho, es el noveno equipo ante el que más partidos oficiales ha jugado el Valencia con 136, por detrás de Barcelona, Real Madrid, Sevilla, Atlético, Athletic, Espanyol, Real Sociedad y Betis.

Como curiosidad, en la temporada 86-87 disputada en Segunda, el Valencia se enfrentó al Celta en la categoría de plata con un triunfos local para cada uno. 67 victorias, 33 empates y 36 derrotas es el acumulado histórico entre Primera, Segunda y la Copa. Un balance bastante favorable para los blanquinegros, que han ganado los últimos cuatro enfrentamientos consecutivos desde que el Celta venciese por 2-1 en octubre de 2020.

Pero el Valencia y el Celta están unidos más allá de los partidos. También en los movimientos de jugadores. De hecho, el conjunto gallego es uno de los clientes preferidos de la era Meriton, con un total de diez operaciones de transferencias entre ambos clubes, tanto de compra como de venta como de cesiones. El equipo de Balaídos es el club del que más jugadores ha fichado el Valencia bajo el mandato de Peter Lim con un total de seis: Maxi Gómez, Wass, Roncaglia (cedido), Orellana (cedido y posteriormente comprado), Santi Mina y Yoel (cedido y posteriormente comprado).

Hay que sumarle también que en la operación de compra de Maxi, Mina hizo el camino de vuelta a Vigo junto con Jorge Sáenz, que se marchó cedido. Una cantidad de operaciones con un mismo club que se hacen llamativas al tener en cuenta que el Valencia se pasó 15 años sin fichar un futbolista del Celta desde que recomprase a Juan Sánchez en la 1999-00, que se había ido traspasado a Vigo cinco años antes como parte del pago por Jorge Otero. El Celta supera en esta tabla de negocios a clubes como el Atlético o el Barcelona, con cuatro fichajes de esos equipos cada uno. Porque con estos dos gigantes españoles, se ha vendido más que comprado: Wass, Kondogbia, Neto, André Gomes, o Paco Alcácer.

El Valencia de Meriton en los últimos años se ha olvidado de la liga española y ha centrado su política de fichajes en adquirir futbolistas que proceden de ligas europeas. Algo que sin ser científicamente cierto, se puede atribuir como uno de los motivos del descalabro de esta temporada. Porque si no fichas a jugadores que conocen el fútbol español, les cuesta más adaptarse, más allá de la barrera del idioma. Además atrás queda ya cuando el Valencia se hacía con los mejores talentos del campeonato nacional como David Villa o Dani Parejo. Porque si fichas de fuera, te refuerzas tú. Pero si fichas en España, te refuerzas y a la vez debilitas al resto. Un modelo que otros clubes como la Real Sociedad, el Betis, el Villarreal o el Sevilla sí aplican.

Esta temporada el único jugador que se incorporó al Valencia de un equipo de LaLiga fue Nico González —y cedido, que no cuenta como fichaje— que apenas llevaba una treintena de partidos con el Barcelona. En la 21-22, Bordalás sí trajo a Duro, Foulquier y Marcos André del mercado nacional. Pero con Javi Gracia en la 20-21, no se fichó a nadie de nuestra liga. En la 17-18 y en la 14-15, sólo llegaron dos cedidos, Vietto y Yoel, respectivamente. Porque aquí, la presencia de Mendes, es menor.

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