Comert llega para calmar la tempestad

Y es que, 24 días después de que el mercado se abriera, la secretaría técnica que dirige Miguel Ángel Corona y tutela Anil Murthy ha gestionado ya algunas salidas pero, sin embargo, no ha formalizado ni una sola de las dos contrataciones que a voz en grito lleva demandando Bordalás desde que este verano se puso manos a la obra. El discurso del entrenador el sábado en el Wanda, tras escurrírsele entre las manos la victoria frente al Atlético, demuestra que ha llegado a su límite y que si no estalló en la rueda de prensa, poco le falta.

De ahí que en medio de esa amenaza patente de tempestad, el Valencia prefirió dejar que se expandieran este domingo los apuntes que iban hacia un cierre inminente del acuerdo con Eray Cömert y el Basilea, para que el defensa central pasara a ser blanquinegro de un momento a otro, comprometiéndose con un contrato hasta 2025. Además, no hay que perder de vista la opción de Diawara para el mediocentro y el último nombre, el del dinámico Bryan Gil, con poco protagonismo en el Tottenham y con bastantes propuestas encima de la mesa, entre ellas también la de la Real Sociedad.

¿Lo bueno de Comert? Que el desembolso será pequeño porque Comert prefirió no renovar y terminaba contrato con el conjunto suizo este mes de junio próximo. ¿Lo malo? Que por un lado no cumple uno de los requisitos impuestos por Bordalás de conocer la Liga española, y por otro que lleva sin jugar un partido de competición desde noviembre cuando la cosa se puso tensa ya con su club al no querer aceptar la propuesta de renovación. Algo así como lo que decidió hacer Wass en el Valencia pero con la diferencia de que el danés es tan necesario que ha jugado hasta que la situación ha llegado ahora sí al límite.

Nacido el 2-4-1998 en Rheinfelden (Suiza) pero de origen turco, Comert tiene cierta presencia física (1,83 m y 80 kg) y en el Basilea coincidió con el que puede convertirse en su nuevo compañero: Alderete. Por esa misma razón Bordalás lo conoce del partido que el cuadro helvético disputó contra el Getafe de la Europa League.

A sus 23 años y pese a que es internacional absoluto por suiza, quizás la exigencia de la competición española le puede pasar factura (por eso Bordalás prefería, entre otros, al bilbaíno Unai Núñez). No está el Valencia muy boyante que digamos en una demarcación especialmente señalada por el gran número de goles que lleva el equipo en contra. La baja de Gabriel Paulista, que no tiene fecha todavía de reincorporación, ha provocado que Bordalás haya tenido que ingeniárselas en los últimos encuentros apostando por una defensa de tres centrales, recurriendo a Mosquera y, sobre todo, a Foulquier.

A Corona le falta completar las demandas de Bordalás, con ese mediocentro (Diawara juega hoy con Guinea contra Gambia los octavos de la Copa de África) y ver qué pasa con Bryan Gil.