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Enrique Saura. Bernat Navarro Porter

El debut de Saura con triunfo en La Romareda

El túnel del tiempo ·

El de Onda inició ante el Zaragoza una brillante trayectoria que le llevó a portar el brazalete de capitán y permanecer diez temporadas en el Valencia

paco lloret

Viernes, 11 de noviembre 2022

Enrique Saura debutó con el Valencia la noche del domingo 9 de noviembre de 1975 en Zaragoza. En ese mismo partido se produjo otro estreno, ... el de Esteban, un centrocampista curtido en el Mestalla que reemplazó a Saura a los 20 minutos del segundo tiempo, cuando los valencianistas vencían por la mínima gracias a un gol madrugador de Pep Claramunt.

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El encuentro cerraba la novena jornada del campeonato 75-76 y se televisó en directo cuando el color todavía no había llegado a las pequeñas pantallas. Quique Sánchez Flores suele contar, cuando evoca sus recuerdos infantiles, que los duelos Zaragoza-Valencia forman parte de su memoria futbolística porque eran habituales cada año en la programación televisiva. No anda errado, en una época en la que Televisión Española sólo ofrecía un partido en directo de cada jornada, este duelo se transmitió cuatro veces desde la campaña 70-71 hasta la 76-77, dato ilustrativo si se tiene en cuenta que hubo una temporada - la 71-72- en la que el conjunto aragonés compitió en segunda división. Aquel encuentro del debut de Saura fue el último de primera división disputado en España antes de la muerte del general Franco, acaecida once días después. El fin de semana siguiente no hubo jornada por compromiso de la selección.

El choque representaba una prueba de fuego para ambos contendientes cuya marcha en el torneo no resultaba demasiado satisfactoria. El Valencia acudía a la cita sin sus dos extranjeros: ni Keita ni Rep estaban en la convocatoria, además de sufrir la baja de Barrachina. Con Manolo Mestre en el banquillo después de la fulminante destitución de Milosevic al tercer partido, había combinado actuaciones más que aceptables con otras decepcionantes. En la jornada anterior había igualado a uno con el Real Madrid en Mestalla en un duelo vibrante. Por dos veces, la madera salvó a los visitantes. Para los zaragocistas el panorama era mucho peor, clasificados cerca de la cola de la tabla. En la campaña anterior habían sido subcampeones con un excelente conjunto conocido como el de los 'zaraguayos' en el que destacaban sus delanteros 'Lobo' Diarte y Nino Arrúa. A su lado futbolistas de entidad como el mítico Violeta, Manolo González, Planas y García Castany.

Poco público en La Romareda y un ambiente desangelado en las gradas. El Valencia vistió con pantalón blanco y una camiseta azul con dos rayas rojas y otras dos amarillas en el pecho. El once inicial era una amalgama de juventud y veteranía. La experiencia de Claramunt, Valdez, Quino y Jesús Martínez contrastaba con las primeras horas de vuelo de noveles como Cordero, Saura, Basauri y Barrero. Una generación intermedia representada por Planelles, Cerveró y Tirapu completaba la alineación. La primera parte fue del Valencia que dominó a un rival nervioso e impreciso. Antes de los diez minutos una genialidad de Valdez por la banda izquierda la culminó Claramunt con un remate ajustado desde la frontal para inaugurar el marcador. La única oportunidad clara de los locales fue un remate estrellado en el poste.

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En la segunda mitad las cosas cambiaron. El Real Zaragoza se lanzó al abordaje y emergió la figura de Basauri, el joven guardameta vasco que, gracias a su envergadura, se imponía en los balones divididos y en los centros bombeados al área. Gracias a su extraordinario poderío físico, Basauri se impuso con autoridad al acoso rival, recurrió al despeje de puños en más de una ocasión para alejar el peligro y desahogar a sus compañeros del dominio al que estaban siendo sometidos. El Valencia resistió y en los últimos compases llegó la sentencia gracias a una antológica acción de Quino. El delantero andaluz burló la salida del portero zaragocista y se recreó en la suerte con un par de regates a los desesperados defensas que cubrían la portería para, finalmente, marcar con un remate suave y esquinado. Un gol con suspense que representaba un alivio para los de Mestalla. Aquella victoria fue la única lograda por un conjunto visitante en aquella jornada. El resto de encuentros se resolvieron con triunfos locales o empates, dato que revela la dificultad de vencer en desplazamiento en aquella época.

Saura cumplió en su debut con una aportación sacrificada, escorado a la derecha y en apoyo de sus compañeros de la medular. Su llegada al Valencia se había retardado más de la cuenta aunque la operación se había pactado con el CD Castellón, su club de procedencia, en verano. De hecho, Enrique Saura llegó a disputar las primeras jornadas de la liga con el conjunto 'orellut' en segunda división. Su primera aparición en Mestalla tuvo lugar casi un mes después, ante la UD Salamanca, con triunfo por 1-0. En su primer ejercicio como valencianista no marcó ningún gol porque se le ubicaba como centrocampista, por detrás de Rep, el extremo derecha de aquel equipo que navegó de forma irregular a lo largo del ejercicio. Una vez acabado, Saura fue convocado para jugar con la selección olímpica en los Juegos de Montreal. De esa forma arrancó su brillante trayectoria que le llevó a ser capitán, conquistar títulos y permanecer durante 10 temporadas en el Valencia.

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