El doctor Sánchez, nueva esperanza para Rodrigo

A Rodrigo Moreno el nuevo año le trajo una lesión incómoda de tratar. El 4 de enero contribuyó el delantero a la victoria del Valencia contra el Eibar pero la rodilla le había jugado una mala pasada. El esguince, primer y diáfano diagnóstico, le impedía competir en la Supercopa y amenazaba con dejarle fuera de circulación durante varias semanas. Rodrigo, que a lo largo de su carrera no ha sido un futbolista propenso a los problemas físicos importantes, volvería a competir tan sólo 20 días después de caer lastimado, pero a partir de ahí ya nada sería igual. Entre tanto, se vio envuelto (por enésima ocasión) en una negociación auspiciada por Valencia y Barça que finalmente no cuajó. Es decir, ni cuerpo ni mente estaban en su sitio.

Celades habló en muchas ocasiones de la "profesionalidad" de Rodrigo, dando por hecho que resurgiría como tantas otras veces ha hecho. El caso es que el técnico le puso 32 minutos en la victoria contra el Barcelona, otros 38 contra el Celta y amplió la carga recientemente; para la Copa del Rey contra el Granada (86 minutos) y casi una hora en la derrota del Coliseum. La salud ya no le dio a Rodrigo para estar listo el pasado fin de semana en la visita del Atlético.

En el último mes y medio y pese a ir apareciendo de forma más o menos continua en los planes de Celades, Rodrigo no ha dejado de sufrir dolor en las rodillas y suele salir a los entrenamientos con las dos articulaciones vendadas. Cualquier esperanza de que llegara a tiempo para jugar esta noche en San Siro fue descartada por las propias sensaciones del futbolista, que ha iniciado ya la apuesta por otro cartucho: el del doctor Mikel Sánchez.

Rodrigo, que ha visitado en varias ocasiones a Cugat en Barcelona, se pone en manos del traumatólogo vitoriano, entre los mejores especialistas de España (como el doctor Antonio Maestro) y cuyas manos han reparado los golpes y lesiones de Iniesta, Xavi, Puyol, Nadal, Diot (pasó un calvario hasta que Mikel Sánchez acertó con su problema) y el Rey Juan Carlos. El delantero ya asumió que no estaría para la batalla ante el Atalanta pero necesita una solución de cara a los próximos meses. Rodrigo espera que Mikel Sánchez acierte con la tecla porque además de los objetivos por cumplir del Valencia, los internacionales tienen la mirada puesta en la Eurocopa.