Con el asterisco puesto, y la prudencia con la que siempre hay que tratar las cuestiones de la pandemia referentes a los escenarios futuros, tras las medidas aprobadas este lunes por Consejo Interterritorial de Sanidad referentes a las limitaciones a los recintos deportivos, se abre una opción para que Mestalla vuelva a tener una foto de lleno hasta la bandera (en el caso obvio de vender todas las entradas) que no ha sido posible desde el arranque de la pandemia. Para el inicio de marzo, si no vuelve a complicarse el panorama de los contagios, está previsto que el aforo se libere hasta el 100%, aunque sea aún con la mascarilla puesta. El partido de vuelta de la semifinal de la Copa del Rey frente al Ahtletic está programado para el miércoles 2 de marzo a las 21 horas.
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Las medidas adoptadas aumentan de inmediato los aforos del 75% al 85% en los estadios abiertos, ya sin la obligatoriedad de guardar distancia de seguridad puesto que a partir del 50% es literalmente imposible hacerlo con las butacas, y del 50% al 75% en los pabellones cerrados, como por ejemplo la Fonteta en los partidos del Valencia Basket (el primero de ellos mañana contra la Virtus de Bologna en la Eurocup) y también en la Copa del Rey que se celebrará en Granada entre el 17 y el 20 de febrero en el Palacio de los Deportes, donde el conjunto taronja disputará su partido de cuartos de final el viernes 18 contra el UCAM Murcia.
El primer efecto colateral sí que será negativo para el Valencia puesto que San Mamés estrenará ese aumento del aforo máximo hasta el 85%. Las cuentas que hace el Athletic son que le permitirá liberar 5.000 entradas con lo que los abonados del conjunto vasco no tendrán que acceder a un registro previo para asistir al partido de Copa puesto que con el nuevo aforo tienen cabida todos los socios. El resto de entradas, hasta completar el aforo máximo, se ampliarán con colectivos dentro de la afición del conjunto bilbaíno puesto que la decisión que no ha cambiado con la nueva normativa es la apertura de una grada visitante con venta de entradas. La afición del Valencia no contará con esa posibilidad en el partido copero de San Mamés ni tampoco la afición del Betis, en la ida de la otra semifinal que se disputará en Vallecas.
La puerta más ilusionante que abre el nuevo panorama aprobado este lunes es que, por primera vez desde que arrancó la pandemia en España en marzo de 2020, hay una opción real de terminar la temporada con los estadios llenos. El primer gran evento que podría tener esa vitola es la Copa de la Reina de baloncesto femenino, que se disputará en la Fonteta entre el 24 y el 27 de marzo. Un dato que puede tener mucha importancia puesto que las taronja buscarán quitarse la espina de la edición de 2021, donde perdieron la final contra el Girona con una Fonteta con presencia testimonial en las gradas. Con un pabellón que aspira a estar lleno si se puede implementar la hoja de ruta marcada con esta nueva normativa, el panorama cambia.
El gran sueño del valencianismo en esta edición de la Copa del Rey es que ese lleno en Mestalla del 2 de marzo catapulte a los de Bordalás al intento de conseguir la novena. El 23 de abril es otra fecha marcada en rojo puesto que se abre la opción de que la final de La Cartuja en Sevilla también se pueda realizar con un aforo completo. Algo que permitiría repetir la histórica foto de la final de 2019, donde el Valencia conquistó el hasta ahora último título del club.
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