El exvalencianista Catoira entra en juego en la doble operación de Marcos André y Amallah

Al Valencia le ha salido un pequeño 'aliado' para finiquitar una operación doble, aunque vaya en distintos documentos, clave en su mercado. Cuando el Valladolid anunció el despido fulminante de su director deportivo, Fran Sánchez, entraron los sudores fríos en los despachos de la Plaza de la Afición. Una acción así, a menos de dos semanas para el arranque de la Liga, puede poner en peligro todo lo que estuviera negociando el despedido. Suena a cierta lógica empresarial. Este miércoles, el nuevo director deportivo del conjunto pucelano, Domingo Catoira, despejó todas las dudas. Para respiro de la entidad valencianista: «Las operaciones que estaban cerradas o a falta de flecos seguirán su curso y Marcos André es un jugador del agrado de todos. Nos puede dar un valor diferencial en Segunda. Las ventas se producen para poder fichar. Hay jugadores que no quieren jugar en segunda con el Valladolid y tienen la posibilidad de salir. Poco más podemos hacer».

El mundo del deporte tiene, en ocasiones, giros muy curiosos. La persona que firmará los documentos por parte del Valladolid en esta operación de ida y vuelta es un exempleado de la entidad de Mestalla. Por partida doble. Catoira llegó al Valencia en 2010 avalado por Braulio Vázquez, que en aquella época era el máximo responsable de la parcela deportiva y hombre de confianza de Manuel Llorente. En 2014, coincidiendo con el proceso de venta, el gallego salió del Valencia y fue reclutado de nuevo por Braulio, dos años después, para acompañarle en la secretaría técnica del Valladolid. De Pucela volvió a recorrer el camino inverso en 2017, cuando Alesanco lo reclamó para formar parte de su equipo de trabajo, junto a Vicente Rodríguez. Esta segunda etapa le duró tres años a Catoira, que fue despedido como director de scouting en la primera medida de César Sánchez cuando fue ascendido a director deportivo del Valencia en 2020. Puso, cosas de la vida, a Miguel Ángel Corona en su lugar. Tres años después de ese curioso viaje de ida y vuelta entre la Comunitat y Castilla y León, se convierte en uno de los negociadores para poner punto y final a una doble operación donde las dos partes salen ganando. En su realidad.

Con la máxima de que Peter Lim no va a realizar, a corto plazo, ninguna inyección de liquidez, la entidad está obligada a seguir reduciendo la masa salarial para, a la vez, liberar espacio en el Fair Play y dar entrada a los nuevos jugadores que sigue demandando Baraja para la plantilla. Marcos André, con 5 millones por amortizar aún de su fichaje por el Valladolid, puede emprender el camino de vuelta por una cantidad inferior pero que sí supera la ofrecida por el Alavés, que nunca llegó a los 3 incluyendo los variables. La clave con la llegada de Selim Amallah es la cuantía de la opción de compra de su cesión. El Valladolid, desde el arranque de la negociación, siempre ha querido que sea de 10 millones. El Valencia, que no pase de 7-8.