Lim, ese hombre de fútbol

Ha tenido que hablar Miguel Angel Corona, tras tres años de silencio, para enterarnos de que el principal accionista del Valencia CF, el singapurés Peter Lim, es un experto en fútbol. «Lim tiene una memoria futbolera asombrosa, rememorando partidos, eventos... Estuvo genial. Mantuvimos muchas conversaciones futboleras». Estábamos equivocados todos los demás. Creímos ver a un especulador que ha movido más de 1.000 millones de euros en compra-venta de jugadores, que ha destruido a un equipo campeón tras haber ganado la Copa de 2019, que ha dejado al club fuera de Europa en los tres últimos años (y va camino del cuarto), que no ha tenido ningún interés en acabar el nuevo Mestalla, que ha mantenido seis años como presidente a un majadero...

La voz de Corona. La comparecencia de Corona estuvo inspirada por Gattuso, cansado de responder a asuntos de planificación deportiva. Veamos sus méritos. El ascendido a director deportivo ha renovado a Gayà porque Gayà quería quedarse a toda costa y porque no ha habido ninguna gran oferta por el capitán. Ha logrado una plantilla muy joven y aseada, con unos cuantos cedidos (Kluivert, Nico, Lino), y un ilustre veterano (Cavani), atraído por la personalidad del entrenador (Gattuso), pero el equipo se ha descapitalizado en los últimos años: la prueba la calamitosa segunda parte del partido del sábado ante el Mallorca, cuando faltó el oficio, la calidad y la sabiduría de los grandes futbolistas, todos (menos Gayà) vendidos por Lim. Y en cuanto al técnico, la elección fue de Mendes, no de Corona, quien sí apostó por Bordalás, un estilo opuesto, por cierto, al del actual entrenador. ¿Qué gusto futbolístico tiene Corona? Tampoco nadie le preguntó.

Zasca monumental. Javier Solís, director corporativo (expresión estadounidense traducida), no está tampoco para sacar pecho ni para acusar a los políticos del Ayuntamiento de la capital de retrasar las obras del nuevo Mestalla. «Está politizado el asunto porque hay una elección a la puerta de la esquina», dijo Solís. Y, claro, le vino botando al Ayuntamiento. «El actual máximo accionista lleva siete años de objetivos y probados incumplimientos sin ninguna actuación tendente a cumplir con sus obligaciones tales como acabar el estadio o construir el polideportivo de Benicalap».

El 'granota' Rubiales. En una entrevista en la Cope, Rubiales volvió a su disfraz preferido, el del Robin Hood contra los poderosos, y esta vez, además, presumió de levantinismo para justificar una charla privada en la que confesaba su tirria por el VCF. Bien, el levantinista Rubiales, tan expeditivo cuando hay dinero de por medio, no ha movido ni la ceja para reconocer la Copa de la España Libre conquistada por el Levante UD en 1937.

Llaneza. Lo recordaré con ese andar lánguido, arrastrando los pies, de corrillo en corrillo, maestro de ceremonias, en la urbanización Puig-val, en El Puig, donde fue feliz con su familia. Duro en ocasiones, de gran corazón en otras, el Villarreal, la Liga y la selección española le deben mucho. Él sí fue un hombre de fútbol.

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