Kang In deja tocado a Meriton

Con lo bien que le están saliendo las cosas al equipo de Bordalás y con el firme propósito de Meriton de mejorar –vía deportiva– su imagen de cara a los aficionados, una nueva implosión ha vuelto a estropear el final del verano en clave valencianista, repitiendo la sensación que pasó el año pasado con Parejo cuando se fue gratis al Villarreal, o cuando se ventiló a Ferran Torres por 23 millones más objetivos al City porque no se había sabido en su momento convencer al de Foios. A Meriton le cuesta conservar las apariencias y la salida ahora de Kang In del Valencia a coste cero vuelve a poner al máximo accionista en el disparadero. Por un lado recibe aplausos por negarse a vender a Guedes por 20 millones pero, por otro, se le acribilla pro dejar escapar una de las 'perlas' de Paterna. Además, con el añadido de que se le desmonta a Anil Murthy parte del discurso de Academia que durante los últimos tiempos ha venido defendiendo. En diciembre, sin ir más lejos, el presidente aseguraba que el Valencia ganaría la Liga en «diez años» gracias al plan de potenciar la cantera.

Pues bien, curiosamente, los dos nominados del Valencia para la Golden Boy en 2020 ya no están aquí (para 2021 también lo fue Kang In y Yunus). La historia se repite con estos dos canteranos que en su momento sirvieron como escaparate para potenciar la gestión del club. El de Foios (una de las imágenes para el centenario), en un año en la Premier ha sido capaz de multiplicar su precio y CIES (ya se sabe que los valores asignados son una estimación sin valor contable) le pone una cotización actual de 80,5 millones de euros. A Parejo, al que se lo llevó el Villarreal por la puerta de atrás, por ejemplo se le otorgan 78,3 millones. De Kang In, inexistente casi para el Valencia en los últimos meses desde el punto de vista mediático y promocional, Transfermarkt le da un valor de mercado de 10 millones de euros (50 a Ferran). El club no distribuyó ni una sola foto del surcoreano cuando empezó a entrenarse hace escasos días y hay detalles que tampoco pasan desapercibidos. En noviembre pasado, por ejemplo, en el discurso de bienvenida de Murthy a los niños y niñas de la Academia, fue citando ejemplos en los que mirarse y que estaban a las órdenes de Javi Gracia, pero se olvidó de Kang In. La cosa estaba ya bastante torcida por entonces. Aún se complicó más el asunto cuando el Valencia se vio forzado a activar el plan de urgencias para acomodar a Marcos André y liberar la plaza de extracomunitario que ocupaba Kang In, que todavía tenía un año más de contrato.

Con este escenario, el Mallorca y el propio Kang In sólo han tenido que jugar sus bazas. Luis García le va a dar minutos, algo que no consiguió el atacante de manera firme como blanquinegro con todos los entrenadores que por aquí han desfilado.

Es verdad que Meriton trató en su momento de retener contractualmente al futbolista (21 años) ofreciéndole un contrato por cinco temporadas que éste no aceptó, pero a todos los presidentes de alguna manera les acaba pasando factura situaciones como ésta. Murthy ya lo sufrió con Ferran pero, por ejemplo, a Llorente se le criticó en su día por no haber sabido negociar antes con Jordi Alba, y tener que venderlo al Barça en su último año de contrato por 14 millones. Ahora ni calderilla ni opción de recompra ni porcentaje por un hipotético futuro traspaso. Si alguien tiene la oportunidad en su momento de hacer negocio por Kang In, además del jugador, ése va a ser el Mallorca. Diez años de inversión que se esfuman para el Valencia. El club, lógicamente, responsabiliza al futbolista y a su entorno de haberse negado en la renovación. La versión del jugador hay que limitarla a la carta de despedida que hizo público este mismo domingo.

Fue justo cuando se hizo oficial el escueto comunicado del club informando de la resolución contractual. Hubo críticas por lo aséptico del mensaje del Valencia, de apenas cuatro líneas. Pero más corto lo fue, incluso, el que le dedicó en su momento a Ferran: dos líneas y poco más de veinte palabras para el de Foios.

«En 2011 mi familia y yo decidimos abandonar nuestro país para que pudiera cumplir mi sueño: convertirme en futbolista profesional. El Valencia CF fue el equipo que me abrió las puertas y apostó por mí. Eso es algo que jamás olvidaré y que hoy, el día que me despido de él, quiero poner en valor», dice Kang In en su escrito. «En el Valencia CF me he formado como futbolista, pero sobre todo como persona. Los valores que he aprendido en su Academia espero sean el motor que guíe mi futuro. Agradezco eternamente a todos los compañeros, entrenadores y profesionales del club que he tenido tanto en la etapa de formación como en el primer equipo y, sobre todo, quiero agradecer profundamente el cariño que he recibido por parte de los valencianistas, de quienes he aprendido a vivir el fútbol con pasión», añade antes de su cariñosa despedida en clave blanquinegra.

A Meriton le sostienen ahora los Gayà, Soler, Jaume y compañía en su ideario de política local, pero también es verdad que repescó a Hugo Guillamón a última hora cuando el ahora indiscutible para Bordalás tenía casi los dos pies fuera del Valencia. Kang In no contaba para Bordalás y éste fue siempre neutro cuando se le preguntó por él.

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