El momento de que el Valencia sea el Valencia

Cuando todo va mal, todavía puede ir a peor. Llega un partido determinante y Celades, que ya no contaba con Gayà y Kang In por sanción, tampoco podrá disponer de Coquelin. Pero no sólo para este choque, quizá para lo que resta de temporada. Cuando el futbolista se sentó en el suelo en los minutos finales del encuentro frente al Real Madrid a más de uno le temblaron las piernas. Pues la lesión es más grave de lo esperado. El técnico quiere ser positivo y espera contar con él en los últimos partidos de esta campaña. Pero en el momento clave se queda sin un jugador decisivo. La buena noticia es la vuelta de Gabriel Paulista. Celades lleva sin dormir desde que el brasileño cayó en combate. En ese tramo ha visto cómo Diakhaby se autodescartaba por sus niñerías que cuestan puntos y ha comprobado que Hugo Guillamón es más que fiable. Mangala, que parecía desahuciado, tuvo una actuación más que aceptable frente al conjunto de Zidane. Lo presumible es que sea el canterano el que acompañe al exdefensa de Villarreal y Arsenal. Todo ello en la visita del Osasuna. Llega el momento de que el Valencia vuelva a ser el Valencia. No va más.

Nadie contempla un fallo en Mestalla. Porque si ocurre es porque no se merece jugar la próxima temporada en Europa. Lleva un punto de seis disputados tras el confinamiento y el tren continental se escapa. La Liga de Campeones se antoja una quimera y la Europa League tiene que ser el mal menor. Porque una temporada sólo con la competición doméstica se convertirá en una tragedia. Aluvión de jugadores vendidos y sin figuras que quieran llegar a un conjunto sin la proyección que da enfrentarse a los mejores de Europa. Todo un drama.

Una esperanza es que el Valencia continúa invicto en su estadio esta temporada en la Liga. Pero sin público no consigue ganar. Empató frente al Levante y cayó con contundencia ante el Atalanta. La cuarta plaza, que estaba hace dos jornadas a cuatro puntos, ahora está a seis. Los rivales de arriba no ceden e incluso el Sevilla se atreve a igualar con el Barça.

El Valencia está siendo visiblemente perjudicado por las acciones arbitrales. El VAR le ha restado hasta siete puntos. Está claro que si se hubiera dado validez al tanto de Rodrigo, la cosa hubiera cambiado. Pero es un hecho que el equipo se empequeñece conforme pasan los minutos. Tras una primera parte ilusionante frente al Real Madrid, la segunda fue un drama. Dominados y superados. Tres goles encajados. Ahí llega una de los grandes problemas. Los rivales tienen barra libre para colarse en la portería de Cillessen. Le falta solidez. En lo que va de año ha encajado 37 goles en 17 partidos. Esta situación sería impensable con Marcelino. Y no es una cuestión sólo de los defensas, se trata de un concepto global. Los últimos diez partidos siempre han acabado con, al menos, un tanto encajado. Justo cuando Garay dejó de ser la pareja de baile de Gabriel Paulista. La lesión del argentino ha sido determinante.

Los futbolistas decisivos tiene que hacer honor a este honor. El confinamiento no ha sentado demasiado bien a Parejo. El capitán necesita varios partidos para ponerse a su tono habitual, ese que le hace dominador. Al menos Rodrigo no acusa la falta de competición. Lleva dos partidos a su mejor nivel. En Valdebebas demostró que tiene un nivel top. Pero a esta pareja le falta el futbolista más caro de la historia del Valencia. Gonçalo Guedes sigue igual. Decían que había vuelto como un toro, que se había preparado mejor que nunca. Será así, pero no es determinante. Tanto que no consigue marcharse de ningún rival. Le sigue faltando esa punta de velocidad y su contundencia para marcar goles. Pero ya no valen las excusas. Tiene que demostrar su caché. Está obligado a ello.

El Valencia se encontrará enfrente a un Osasuna herido. Llega a Mestalla tras una contundente derrota en El Sadar frente al Atlético (0-5). Ya es raro que los rojillos sufran una tempestad de ese estilo. El grupo de Jagoba Arrasate se muestra siempre rocoso y duro de superar. Pero ante el Atlético ocurrió lo contrario. Es un buen espejo en el que el Valencia debería mirarse. En ataque, la ausencia continuada del 'Chimy' Ávila les está perjudicando en demasía. Se trata de un futbolista diferencial, que aporta gol, garra y una marca especial para los defensas rivales. Para Mestalla sí parece que Rubén García será titular, tras perderse un choque por sanción y no ser titular ante el Atlético. Quien se lo pierde seguro es el lateral Toni Lato, cedido por el Valencia, porque el contrato así lo exige.