La solución al plan Porchinos es la clave para la venta del Valencia

De las cuatro contingencias para desatascar la venta del Valencia a las que aludió el presidente del club, Amadeo Salvo, en la rueda de prensa del viernes, la más espinosa sin duda es la de la situación de Porchinos, la partida de Ribarroja en la que se proyectó la futura ciudad deportiva. A la espera de la decisión del Tribunal Supremo, el club trabaja a marchas forzadas para tratar de subsanar el problema. Resolverlo de manera definitiva es imposible porque está pendiente de una resolución judicial. La solución pasa por darle a Peter Lim el confort jurídico suficiente para que haga efectiva la compra sin temor de acabar en los tribunales.

Este es el gran caballo de batalla para cerrar la venta. El club, según las fuentes consultadas, está trabajando en ello para poder solucionarlo con la gente afectada por el proceso. El Tribunal de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ) anuló en 2006 el plan urbanístico de Porchinos y la decisión fue recurrida al Alto Tribunal. Una vez se produzca la sentencia, si es desfavorable, alguna de las partes tendría que pedir la ejecución de la misma, algo que también tiene que ser aprobado por el tribunal.

El problema es que no hay margen. La venta a Lim no puede esperar tanto, y el Valencia trabaja con la intención de que el inversor se sienta abrigado. El Valencia, a través de la empresa Litoral de Este que creó el expresidente Juan Soler para pegar el «pelotazo» urbanístico, como él lo calificó, vendió los terrenos a particulares y empresas, entre ellas Nozar, para ejecutar un residencial con más de 2.000 viviendas. Hoy ese PAI está en el aire. El Ayuntamiento de Ribarroja, que ha estado cobrando del Valencia, garantiza que hay agua para la zona. Las próximas dos semanas son claves para desbloquear la situación. El Valencia va a trabajar a fondo con el fin de superar la contingencia que se prevé como la clave para que Lim cierre la venta.

El asunto Newcoval está en camino de solución inmediata. La vía de escape pasa por escoger una de las tres alternativas en la que el club figura como promotor del proyecto Valencia Dinamiza y descartar en la que permanece como copromotor junto a Newcoval. Las fuentes del Gobierno valenciano consultadas ayer por este periódico aseguraron que la contingencia está en vías de solución. La posibilidad de anunciar la Actuación Territorial Estratégica (ATE) es complicada porque en el proyecto figura la solución al hotel que en un principio estaba proyectado en el solar de Jesuitas y que ahora pasaría a la zona que ocupa el nuevo Ayuntamiento. El solar de Jesuitas es un asunto que ha significado un problema a la Corporación que dirige Rita Barberá, por lo que la anulación del ATE se antoja complicada. La opción pasa por escoger otra de las alternativas.

Optar por una de las tres propuesta provocará la reacción de José Granell de Aedifica (el 50% de Newcoval) aunque asumen que la posible indemnización no sería muy alta porque los terrenos sobre los que se actúa son del Valencia y porque no se han llegado a generar expectativas de negocio.