Deportistas sin barreras

«Mi sueño era vestir la camiseta del Valencia pero un tumor cerebral me provocó la ceguera». La frase la pronunció ayer el atleta Pablo Cantero a pocos centímetros de Javi Fuego. El futbolista asturiano contuvo el aliento durante un instante, poco antes de dedicar una mirada de admiración a su compañero deportista. Esa complicidad, la de cinco jóvenes amantes de la actividad física, es la que se logró crear durante la jornada 'Deporte para todos. Que nadie te detenga' que se celebró en la Universidat de València. Fuego y Orban aceptaron la invitación de la Cátedra Divina Pastora de Deporte Adaptado para ayudar en la integración y aunar el deporte profesional y el adaptado. Eso es lo que consiguieron durante más de una hora sobre el parquet del pabellón universitario.

Gabi Calvo, jugador de hockey en silla de ruedas eléctrica, Raquel Mateu, vocal de la comisión de deporte y mujer de la Real Federación Española de Tenis de Mesa y Pablo Cantero, miembro de la selección española de atletismo en 60, 100 y 200 metros y salto de longitud, compartieron experiencias junto a los futbolistas del Valencia, dejando claro que sus objetivos son igual de ambiciosos que los que puedan tener los integrantes de las plantilla más poderosas de Primera. «Quiero dejar huella en el deporte y abrir esa puerta a que todo el mundo lo practique porque el deporte ayuda a escapar de cualquier situación. No importan los obstáculos. Con el valor y la educación que me han dado se pueden superar», manifestó el atleta paralímpico Pablo Cantero.

Orban destacó el «enorme esfuerzo y sacrificio» que representan los deportistas con los que ayer compartieron vivencias y que el espejo tiene que ser de ida y vuelta: «Son un ejemplo para nosotros. No sólo son ejemplos de deportistas, sino también de personas, de auténticos luchadores». Un extremo que también confesó Javi Fuego, que en todo momento estuvo atento de Cantero ayudándole incluso en el momento en el que atleta explicó al auditorio el sistema de la cuerda que le permite correr junto a un monitor. «Puede que desde fuera se vea el deporte profesional por encima del adaptado pero desde mi punto de vista somos nosotros los que debemos coger muchos valores de ellos para ponernos a su altura», señaló el asturiano antes de reconocer que su presencia les ayudaba a «dar más repercusión» a la realidad del deporte adaptado.

Gabi Calvo, que tuvo en Orban a su mejor ayudante para poder expresarse a través del micrófono, señaló que su máximo objetivo es revalidar el Campeonato de España de clubes y luchar por conquistar el Europeo. «El deporte te hace superarte cada día», reconoció antes de agradecer las ayudas que reciben para poder compaginar la actividad deportiva con los estudios.

Raquel Mateo también ratificó que no existen barreras entre el deporte adaptado y el profesional, puesto que para las mujeres la dificultad «es igual. Tenemos menos visibilidad que los hombres y aunque la Comisión del Deporte y la Mujer va haciendo cosas, no tenemos mucha presencia. Estamos ahí pero no llegamos a tener el equilibro». Una reflexión que autoridades, aficionados, empresarios y periodistas deberían hacerse a diario.

La jornada contó con la presencia de Manuel Peris, consejero del Valencia, Juan Cruz Sol, miembro del comité asesor del Consejo, Esteban Morcillo, rector de la Universitat de València, Ramón López, vicerrector de Formació i Qualitat Educativa, Pilar Nieto, subdirectora general Corporativa de Divina Pastora Seguros y José Campos, director de la Cátedra. Los cinco deportistas demostraron que las únicas barreras las tenemos en la mente, no en la práctica del deporte.