Puig y Ribó unifican sus discursos sobre el estadio

La Generalitat y el Ayuntamiento han formado un frente. La administración pública suma fuerzas en su pulso con el Valencia. La ausencia de un plan sólido para finalizar las obras del nuevo Mestalla va agotando la paciencia de los políticos. Ayer, el presidente del Consell, Ximo Puig, advirtió al club blanquinegro de que la única posibilidad de contemplar la prórroga de la ATE pasa por la reactivación de las gestiones durante los próximos meses. Un discurso en sintonía con el del alcalde, Joan Ribó. Meriton debe mover ficha.

«Voluntad de ayudar al Valencia hay tanto por parte del Ayuntamiento como de la Generalitat. No estamos hablando de poner recursos, que no lo vamos a hacer en ningún caso. ¿Pero prorrogar esta situación urbanística o no? Esto se puede hablar siempre que haya compromisos reales y haya una cronología creíble. Y eso es lo que se está debatiendo. Y espero desde el diálogo encontrar una solución», explicó Ximo Puig ayer en À Punt.

Cabe recordar que el presidente del Valencia, Anil Murthy, se reunió la semana pasada con la Generalitat y el Ayuntamiento y transmitió la incapacidad del club para cumplir la Actuación Territorial Estratégica (ATE), que expira en 2025 y abarca los proyectos del nuevo y el viejo Mestalla. Meriton, como máxima accionista de la entidad blanquinegra, pide una ampliación del plazo.

Es más, durante las citas con las instituciones públicas, Murthy llegó a esbozar una fecha: 2030. Para ese año, el club confiaría en tener concluida la ATE. Es decir, cinco años después del límite pactado. Un planteamiento confirmado por fuentes municipales y, curiosamente, negado por el Valencia.

«No queremos en absoluto que haya ningún tipo de confrontación ni buscar soluciones drásticas. Pero el diálogo tiene que tener un contrapeso claro en soluciones concretas, cronologías concretas y una capacidad de hacer el campo posible», insistió ayer Ximo Puig, quien se vio las caras el pasado martes con Murthy.

Así, el presidente de la Generalitat abre la puerta a una prórroga: «Es una cuestión que nosotros vamos a abordar con el conjunto de las instituciones, con el Ayuntamiento, y pensando en el interés general, que también es el del Valencia. Pero sobre todo en el general. Nosotros queremos que se acabe el estadio. Es importante. El Valencia es una referencia para toda la Comunitat. El fútbol muchas veces lo podemos banalizar, pero la realidad es que mueve muchas pasiones y mucha actividad económica y social y sentimientos».

La semana pasada, un día después del encuentro con Ximo Puig, Murthy se citó con el alcalde de Valencia, Joan Ribó, y la vicealcaldesa, Sandrá Gómez. Un cónclave que llevó al Ayuntamiento a lanzar un órdago al presidente blanquinegro. Como condición para plantearse una ampliación de la ATE, el Consistorio marca de plazo hasta mayo de 2021 para que el club muestre su implicación solicitando la licencia de obras del nuevo Mestalla, presentando la modificación del proyecto y poniendo en marcha la construcción del polideportivo de Benicalap. Es decir, debe haber una reactivación en nueve meses.

La tensión entre Meriton y la afición preocupa a los políticos. «En estos momentos es importante que el Valencia tenga un reencuentro con el sentimiento de ese club, que es muy importante para la Comunitat. Hay cuestiones intangibles, de sentimientos y emociones. Y después hay una cuestión urbanística. En un momento determinado, las instituciones valencianas ayudaron mucho al Valencia en que esta operación de reflotamiento. Y lo que ha pasado hasta ahora es que no ha cumplido. Y eso no puede pasar sin más», avisó Ximo Puig.