La reconstrucción pasa por Mestalla

Gráfico 1: Representación de xG acumulado a lo largo del partido, cada escalón en la línea es una ocasión más o menos significativa a favor del equipo.

La evolución de xG, que se centra en la claridad de cada tiro en base a las circunstancias en las que se da, como la distancia a portería o la posición del portero, nos muestra a un Valencia claramente dominante desde el minuto 30 de partido, con ocasiones de gran relevancia, a pesar de que el gol llegó en una ocasión poco clara a efectos de xG. Lo interesante fue ver como Osasuna, a pesar de ir perdiendo en el marcador, no consiguió realizar ninguna finalización a portería en la última media hora de partido. Una vez anotado el gol definitivo fue el Valencia el que tuvo la ocasión más clara con el penalti de Hugo Duro, dejando en evidencia que fue mejor tanto en ataque como en defensa en el partido.

Si hace unas semanas, con el equipo en puestos de descenso y tras perder ante un rival directo como el Getafe decíamos que Baraja tenía un gran trabajo por delante, pues la falta contundencia en las dos áreas era manifiesta, ahora podemos decir que el Valencia ha conseguido resolver al menos una de ellas, especialmente en Mestalla.

Gráfico 2: En el gráfico se observa la evolución por jornada del xG generado (en verde) y recibido (en rojo) de Osasuna a lo largo de la temporada

La evolución del Valencia en cuanto al aspecto defensivo se refleja en un dato clave con respecto a la temporada de Osasuna. Si observamos el xG a favor en cada partido de los rojillos vemos como el partido en Mestalla fue en el que los de Arrasate tuvieron menos ocasiones claras de gol en toda la temporada. En comparación al partido de ida en el Sadar, en el que el Valencia también fue mejor en cuanto a ocasiones, la diferencia es clara, esta vez el conjunto che logra conceder muy pocas ocasiones al rival.

Dejar a un equipo de entre los 10 primeros clasificados con tan pocas ocasiones significativas de gol no es tarea fácil. El éxito defensivo del conjunto de Baraja no se encuentra en reducir la cantidad de acercamientos del rival, sino en conseguir que estos no se traduzcan en ocasiones de gol.

Gráfico 3: Evolución de la cantidad de posesiones del rival en último tercio del campo por cada tiro recibido.

Como decimos, un equipo puede rondar la portería rival durante todo el partido o gozar de infinitos acercamientos a la frontal del área, pero si estas jugadas no finalizan con un disparo es muy complicado que se pueda adelantar en el partido. En el caso del Valencia la estrategia defensiva, en comparación al resto de la temporada con Gattuso, parece clara: centrarse en evitar el disparo más que evitar el acercamiento.

En los últimos encuentros los rivales necesitan de hasta cuatro acercamientos a zona de finalización del Valencia para realizar un disparo, una cifra que se sitúa por encima de lo visto hasta ahora y que refleja la prioridad del equipo en hacerse fuerte en los últimos metros, sin importar demasiado cuanto sea capaz el rival de acercarse. Mientras que con Gattuso los pocos acercamientos que concedían se traducían en ocasiones claras, ahora el equipo che asume más situaciones defensivas pero es capaz de resolverlas con más acierto. Ello sumado a haber conseguido encontrar el gol y los puntos una jornada más en casa hacen pensar que el Valencia está preparado para levantar el vuelo.

Si durante todos los artículos hasta la fecha veíamos cómo la probabilidad de descenso que otorga el portal de datos fivethirtyeight iba aumentando conforme los partidos se sucedían. La última victoria del Valencia ante un rival complicado hace bajar las probabilidades de descenso, según los modelos predictivos, del 23% al 15% tras una nueva jornada, situándose el séptimo por la cola. De cara al próximo partido ante el Atlético de Madrid, el modelo otorga un 58% de posibilidades de victoria rojiblanca, 26% de empate y 18% a la victoria valencianista. Lo que está claro es que si el Valencia consigue volver a ser fiable en defensa y sumar en el Metropolitano dará un gran paso adelante en la lucha por la permanencia.