De Torino aprieta al Consell y exige que el Ayuntamiento cambie el promotor de la ATE

De Torino a Mestalla vuelve a presionar porque intuye que entre unos y otros, la presa se le escurre. De momento, con un escrito de carácter informativo pero sus intenciones siempre tienen un transfondo judicial a largo plazo. La plataforma de oposición a Peter Lim no las tiene todas consigo de que el Consell y el Ayuntamiento se mantengan tan firmes como hasta ahora han aparentado. Se teme que en la reunión entre Anil Murthy y Ximo Puig -la Cope desveló que será el martes que viene, Día de los Santos Inocentes-, el presidente del Valencia salga del encuentro con aire a favor para su nuevo plan: teóricamente, el de reiniciar las obras en septiembre de 2022 como anunció en la junta de accionistas.

En previsión de ese escenario en el que no todos la tienen consigo, De Torino a Mestalla hizo público este lunes su posicionamiento, basado en el estudio que sobre el tema ha hecho el abogado Pablo Delgado, en el que viene a solicitar al Consell que dé cobertura para que el Ayuntamiento «ejecute subsidiariamente y realice la sustitución del promotor» de la obra del nuevo estadio, eliminando de esta manera el pilotaje que Meriton pretende llevar.

Hay que tener en cuenta que De Torino siempre ha considerado que el reiterado incumplimiento de los plazos por parte del Valencia eran suficiente motivo para apartar al club de la gestión de la obra, con el añadido de erosionar la fortaleza de Peter Lim en el Valencia. El Consell, en cambio, concedió el 18 de noviembre pasado una prórroga de 90 días para que Murthy aportase garantías de terminar la obra. Con el acuerdo de LaLiga con CVC y los 80 millones que se van a destinar al campo (dinero insuficiente todavía), el escenario va a cambiar.

Parece que en las instituciones no sentó ayer nada bien que De Torino se manifestara apuntándoles el camino a seguir, basándose siempre en el informe que la propia Abogacía de la Generalitat emitió en agosto. Por eso y casi de inmediato, técnicos de la conselleria de Territorio se pusieron manos a la obra para determinar con más exactitud cuáles serían en todo caso los plazos y si las tesis defendidas por De Torino para apartar al Valencia están fundamentadas jurídicamente. El primer posicionamiento público lo dio Sandra Gómez, concejala de urbanismo y vicealcaldesa, y fue para rebajar de alguna manera el empuje de De Torino: «Estoy contenta al ver que la propiedad ya habla de comenzar las obras. Pero quiero hechos... La obligación de la propiedad continúa vigente, viene de un convenio. La ATE era la recalificación urbanística del viejo estadio. Si cae la ATE tenemos el Plan Urbanístico de 2007 y sería lo que recalificaría esa zona (se refiere al viejo Mestalla). Eso conlleva un espacio residencial. La ATE fue la recalificación de esa zona para hacer también un uso comercial. No tiene otra repercusión. Ahora vamos paso a paso».

De Torino cree que el nuevo y el viejo estadio van ligados y que si no se procede a la sustitución del promotor, se tendría que esperar «entre 3 y 6 años de trámites administrativos, con sus posibles recursos y retrasos». El informe de Abogacía decía que los «Ayuntamientos pueden acordarlo si incumple sus deberes urbanísticos, abriendo un procedimiento de pública concurrencia». Además, -argumenta la Asociación- «existe la oportunidad de que la decisión de acabar el nuevo Mestalla dependa de los valencianos, una vez que se dispone del dinero para ello gracias a CVC. Nuestras autoridades políticas tienen una ocasión única».

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