Los abonos del Valencia siguen a precio de Champions

El Valencia, tras terminar la última temporada bordeando el descenso sobre la bocina, ya está planificando el curso 23-24. Es lo que toca, también para la campaña de abonos. El club trabaja en una línea de congelación de los precios en los pases, salvo algún ligero retoque que se explicará en los próximos días. La noticia, en un contexto económico complicado, podría analizarse con un tono muy positivo. El problema es que hay que ampliar la foto. El proyecto de Meriton va a volver a hacerse una pequeña 'trampa al solitario', puesto que la contención de los precios por segundo año consecutivo está unido a volver a sacar abonos a precios de Champions sin que se dispute ninguna competición europea. Es decir, con menos partidos que la última vez que tuvieron ese baremo de precios y, además, con el producto deportivo más devaluado. La campaña que tocaría, para ser cien por cien positiva, sería bajar los precios hasta ponerlos a la altura (con la variación del IPC) de las temporadas donde el Valencia no ha jugado en Europa.

Por poner la foto completa, en el verano de 2023 la entidad de Mestalla comenzó la campaña de pases con 31.974 abonados. Con unos precios de Champions sin Europa esta vez lo hará con unos 36.000. Es decir, el valencianismo sigue respondiendo pese a todo. A falta de confirmación, los precios de los abonos serán idénticos a los de la campaña 2019-2020, donde el equipo acababa de terminar cuarto y de ganar la Copa del Rey, con la puerta abierta para la Champions. Mismos precios pero sólo con 19 partidos garantizados (los de la Liga). En la Copa, depende de los rivales y las rondas donde se llegue.

La comparación más justa el pasado verano, y en este en cuanto se confirmen unos precios casi calcados a los del curso anterior, hay que realizarla con la última campaña en la que el Valencia no disputó competiciones europeas. En comparación con la 2017-2018, la de la llegada de Marcelino, los precios de los pases de la pasada temporada (los que van servir de referencia ahora) fueron un 30% más caros de media para los accionistas y un 23% para los abonados no accionistas. Un dato que ya sorprendió puesto que en un club regido por la Ley de Sociedades es extraño que se incrementara porcentualmente el precio, en cada sector de Mestalla, más a los accionistas que a los no accionistas. Un gesto más de Meriton 'cuidando' al pequeño tenedor de títulos. Ocurrió en todos los sectores, sin excepción. El más afectado por la subida, comparando con esa última temporada sin Europa, fue la Numerada Descubierta 1, sector 173. El pase en esa zona en la campaña 17-18 costaba 170 euros para accionistas y 200 euros para abonados. Para la 22-23 subió a 297 para accionistas (un 75% más) y 330 para abonados (un incremento del 65%).

En esa comparativa, como dato curioso, la zona que menos subida tuvo fue la Tribuna Lateral, que pasó para los accionistas de 638 a 756 euros (un incremento del 18%) y para los abonados de 751 a 840 euros (una subida del 12%). El abono más caro, aparte del VIP, siguió siendo el de Tribuna Central para no accionistas (1.640 euros) y el más barato, el de la grada de animación (198). Ahí, el Valencia sacó en 2023 un total de 1.100 nuevas altas, para aficionados con un mínimo de 16 años, en esa zona de los Sectores 181 y 183. Ese fue el único abono que bajó de precio puesto que anteriormente costaba 250 euros. El club, además, subió la franja de edad para esa zona hasta los 30 años. Ahora, más allá de ajustar el precio o las condiciones para abonarse en la grada Mario Kempes, el Valencia tendrá que tomar algún tipo de decisión con los dos partidos del abono que esos socios no podrán disfrutar. Son los que le restan de la sanción por el expediente creado tras los insultos recibidos por Vinicius desde ese sector.