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Alumnos durante la prueba de Selectividad. Iván Arlandis

Más de 500 estudiantes de l'Alcoià y el Comtat empiezan la Selectividad

El campus de la UPV ha cedido de nuevo sus instalaciones a la Universidad de Alicante para acoger a los alumnos

Javier Segura

Martes, 8 de junio 2021, 14:36

Un total de 520 alumnos procedentes de todos los municipios de l'Alcoià y el Comtat han ido ocupando progresivamente, como un punto de encuentro, la plaza Ferrándiz i Carbonell de Alcoy, ahora parte del campus que la Universitat Politècnica de València tiene en la ciudad. Con los apuntes en mano y los repasos de última hora, esperaban las instrucciones para ir directos a la sala donde se examinarán. Los nervios, las mascarillas y también la ilusión acompañan a los jóvenes de entre 17 y 18 años, que culminarán con estas pruebas una etapa educativa para la que se han estado preparando durante los dos años de bachillerato.

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Estos han sido los primeros exámenes de la Selectividad 2021 en Valencia, Alicante y Castellón

Tras un 2020 atípico, el campus de la UPV ha cedido de nuevo sus instalaciones a la Universidad de Alicante para acoger a los alumnos que durante todo el día se estrenarán y familiarizarán con este tipo de exámenes, dado que aún les quedan dos jornadas más hasta finalizar el próximo día 10. A las nueve y media de la mañana comenzaba la primera prueba. Con dos tribunales encargados de llevarlas a cabo, aproximadamente la mitad de los estudiantes, 247, se han examinado de Historia de España en el edificio Ferrándiz, mientras que los alumnos restantes, 273, lo hacían en el edificio Georgina Blanes. Pese a que este año ha aumentado, la distancia de seguridad entre alumnos ya venía marcada durante todas las ediciones anteriores en un intento por disminuir miradas entre compañeros que les permitieran tomar prestadas algunas respuestas.

Una vez finalizado el primer examen de la mañana, los alumnos volvían a respirar aire fresco, aliviados por una parte, aunque acalorados por otra,debido al día soleado que les acompaña. Tras compartir opiniones entre amigos, repasar las respuestas de cada pregunta o simplemente lamentar algún fallo, el tiempo para la siguiente prueba siguía corriendo, aunque tras mirar el reloj, todavía podían continuar repasando la literatura valenciana y los 'pronoms febles', materia que les acompaña hasta el mediodía para poder demostrar sus conocimientos en la materia.

Los apuntes de cada asignatura subrayados se entremezclan con amuletos que acompañan a los estudiantes como un empujón para demostrar durante la hora y media de cada prueba que pueden poner en práctica todo aquello que saben. Desde el bolígrafo de la suerte hasta una estampa religiosa que les ha regalado algún familiar, los objetos se guardan como el valor personal que tienen, aunque esperan que sus poderes hagan su trabajo y surtan efecto.

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