Borrar
Un alumno atiende durante una clase virtual. LP
Examen a la educación online en la Comunitat

Examen a la educación online en la Comunitat

La enseñanza no universitaria. La conselleria marca las pautas para sus centros, donde la videoconferencia se limita a cursos muy puntuales y no se considera necesaria para la mayoría de niveles. La red privada sí la está utilizando para atender a casi todo su alumnado

Joaquín Batista

Valencia

Domingo, 7 de junio 2020, 00:04

El 16 de marzo se suspendieron las clases en toda la Comunitat, obligando a sustituir la presencialidad por un modelo para el que pocos estaban preparados. Más de dos meses y medio después, la experiencia ha sido agridulce. La organización por videoconferencias, lo más parecido a una clase normal, ha sido la excepción ante la falta de tecnología, la necesidad de una mayor formación de los docentes en el manejo de las herramientas y al quedar las conexiones en muchos casos a expensas de su criterio. El alumnado, verdadero protagonista del modelo, apuesta por aprender de este trimestre y potenciar las sesiones virtuales para afrontar el futuro inmediato: el reto del nuevo curso.

El modelo público frente a la flexibilidad del privado

La enseñanza no universitaria se ha adaptado de la noche a la mañana a la nueva realidad. Profesores y maestros han tenido que echar mano de unas herramientas digitales que antes eran complementarias y ahora fundamentales, acumulando horas de trabajo a sus espaldas y mucho aprendizaje autodidacta. Las familias se han enfrentado a una más que complicada conciliación familiar y laboral, asumiendo la condición de docentes a tiempo parcial, mientras los alumnos lidian con la elevada carga de tareas.

Los modelos son distintos en función de la titularidad del centro, y también varía la propuesta trasladada: fotocopias, fichas online, PDF editables, clases virtuales, vídeos locutados, de Youtube, tutorías, juegos interactivos, apuntes, test, libros de texto y un largo etcétera.

La red pública se rige por el plan Mulan de la conselleria, que se centra en la programación de tareas para el trabajo autónomo desde casa, dejando la opción de las videoconferencias para los cursos críticos, como 2º de Bachillerato. El sistema se basa en herramientas propias de la Generalitat, con el argumento de que «han sido desarrolladas para garantizar al 100% la privacidad y la seguridad de los datos personales del alumnado». La única externa conveniada, Webex, es para las videoconferencias, al no existir ninguna alternativa de la propia administración y al considerarse que cumple con las cautelas citadas. No se pueden utilizar Zoom, Hangouts u opciones de pago por licencias que impliquen gastos a centros o familias.

«La filosofía del modelo nunca ha sido reproducir las clases presenciales con videoconferencias con el mismo horario», añaden las mismas fuentes. El argumento es que en la mayoría de los cursos el trimestre ha servido para repasar y que Mulan «cuenta con herramientas más efectivas para ello como Aules, que facilita el intercambio de materiales y trabajos».

La falta de la tecnología necesaria por parte de las familias también justifica el sistema, a juicio de Educación. No todas tienen dispositivos o no son suficientes si se teletrabaja o hay varios hijos en casa. «La enseñanza basada sólo en videoconferencias supone dejar atrás a parte del alumnado», argumenta. Para paliar la brecha digital, se prevé disponer el curso que viene de 29.000 tablets que se prestarán al alumnado que lo precise.

Los hermanos Mar, AMparo y Santi haciendo sus tareas. | Quique Martínez, alumno de 4º de la ESO, trabajando con su portátil. IRENE MARSILLA
Imagen principal - Los hermanos Mar, AMparo y Santi haciendo sus tareas. | Quique Martínez, alumno de 4º de la ESO, trabajando con su portátil.
Imagen secundaria 1 - Los hermanos Mar, AMparo y Santi haciendo sus tareas. | Quique Martínez, alumno de 4º de la ESO, trabajando con su portátil.

La red de centros privados recurre a un sistema bien distinto, donde las clases virtuales, las videoconferencias en tiempo real siguiendo el horario presencial, son la norma. Como señala Alejandro Monzonís, presidente de la patronal Acade en la Comunitat, la tónica es que se utilicen desde 4º de Primaria hasta 2º de Bachillerato, aunque también hay casos donde se ha optado por programarlas desde 1º.

El modelo intermedio corresponde a los colegios concertados, que como los anteriores no están sujetos a las directrices de Educación en cuanto a las herramientas a utilizar. «Creo que hemos tenido una capacidad de reacción rápida, muchos centros disponíamos de plataformas online activas o licencias», explica Alberto Villanueva, presidente de la patronal Feceval, que destaca también la variabilidad de cada escuela en cuanto a modelos. «El trabajo ha sido híbrido, en los cursos inferiores son más complicadas las videoconferencias, que han sido más habituales en Secundaria», comenta. También se han priorizado para algunas asignaturas troncales, alternando esta opción con vídeos grabados con la explicación del docente.

«En Infantil se ha recurrido a videoconferencias cortas, también para orientación de las familias, y en Secundaria, donde es más habitual disponer de dispositivos propios, ha sido más habitual implementarlas, así como recurrir a vídeos grabados por los profesores que se pueden consultar las veces necesarias», destaca Vicenta Rodríguez, de la patronal de Escuelas Católicas.

«Ha pesado más el envío de tareas al alumnado»

Quique Martínez | Faavem

El presidente de la Federación Valenciana de Estudiantes, organización representada en el Consejo Escolar de la Comunitat, tiene claro cuál ha sido el modelo predominante. «Por lo que nos traslada el estudiantado no han sido las videoconferencias, sino la utilización de aulas virtuales para el envío de tareas», señala. Aunque reconoce que las clases en tiempo real pueden ser buena opción para avanzar materia, alerta de las dificultades que entrañan. «Es complicado que sean dinámicas o favorezcan la participación de todos, o que la plataforma no tenga problemas de estabilidad, sin olvidar que el acceso es desigual, hay alumnos que carecen de recursos», señala. «La conselleria tendría que valorar la calidad de las conexiones, la cantidad de dispositivos disponibles y la formación en nuevas tecnologías, que hay veces que es precaria», señala. A juicio de la organización, el gran problema que han detectado en este periodo es que «la comunicación con el profesorado no siempre ha sido fluida». Además, considera que se debe dar voz a toda la comunidad educativa para mejorar: «Tenemos que prepararnos bien para lo que venga, sólo entre todos lo conseguiremos».

«La digitalización no se había previsto desde la administración»

Miguel Vargas |Asvaes

«La transformación digital, que no se había previsto por parte de la administración, se ha sacado adelante gracias a la voluntad del profesorado y el alumnado», explica Miguel Vargas, secretario general de Asvaes, la otra asociación estudiantil representada en el Consejo Escolar. Sobre el uso de la videoconferencia como alternativa a la modalidad presencial, echa en falta una mayor apuesta en materia de formación, aunque alerta del hándicap que supone la brecha digital, en el sentido de las carencias que pueden presentar núcleos familiares en situación de desventaja. «Los recursos tecnológicos se van a quedar en el sistema, y no sé hasta qué punto la administración y los centros están planificando que en el futuro inmediato tengamos que ser más digitales», continúa. «Hasta ahora el modelo se ha centrado en tener wifi o pizarras táctiles, que es más un maquillaje que una solución real», ejemplifica. «No sabemos cómo se están preparando, qué convenios tecnológicos prevén o si profesores y alumnos dispondrán de formación para capacitarse de forma efectiva, pues las herramientas no siempre son intuitivas», añade, antes de lamentar que no se haya consultado la opinión del alumnado.

Noticia Relacionada

Publicidad

Premios Goya

La quiniela de los premios Goya 2025

Equipo de Pantallas, Leticia Aróstegui, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández y Mikel Labastida

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Examen a la educación online en la Comunitat