Fallece Matilde Fominaya, cofundadora del restaurante Casa Manolo

Desde hace unos años Casa Manolo luce una Estrella Michelín en la entrada del restaurante. Y un gran porcentaje de ese éxito, de que ese asterisco luzca en su puerta, es gracias al trabajo que inició hace 35 años Mati Fominaya, la madre de Manuel Alonso.

Matilde, que tristemente nos dejó este jueves, y su marido Manuel Alonso llegaron a nuestra Comunitat en 1979. Habían dejado San Lorenzo del Escorial y llegaron a la costa de Daimús por motivos familiares.

Aunque llevaba la hostelería en su sangre, sus primeros trabajos en La Safor fueron diversos, entre ellos recoger naranja para la empresa Pascual Hermanos.

Por azares de destino, la familia Pascual poseía un Camping en Oliva, y pidieron a Manuel y a Matilde que se hicieran cargo del bar y restaurante.

El resultado no pudo ser más ilusionante. La aceptación de clientes fue total, animando a Fernando Pascual a que se hiciera cargo del establecimiento que éste poseía en el propio camping. Tristemente Fernando falleció en 1983.

Un amigo de Manuel y de Matilde les habló de un local con grandes posibilidades en la playa de Daimús, por lo que llevaron a sus hijos a verlo y todos quedaron hechizados por la proximidad al Mediterráneo. Y así fueron los inicios de Casa Manolo.

La noches no eran muy animadas, por lo que Matilde y Manuel se quedaron con el traspaso de Rías Gallegas en Gandia, transformándolo en Don Manuel. Sin embargo, el alquiler del local era desproporcionado y decidieron volver a a Casa Manolo, dónde Matilde se encargaba de los arroces y del horno de asar pollos.

Matilde era una gran cocinera. Uno de los platos más emblemáticos del actual Casa Manolo son sus callos, unos callos que yo probé y animé a Manuel a que los incluyera en la carta, consiguiendo que fueran considerados uno de los mejores platos de la casquería nacional.

Hoy estoy triste, todos los días que visitaba Casa Manolo buscaba a Matilde para darle un beso que me transmitiera su alegría y naturalidad. Nos ha dejado una gran cocinera, pero, sobre todo, nos ha dejado una gran mujer.